El domingo podría activarse la situación de alarma roja ante la posibilidad de que la velocidad del viento se incremente
BILBAO, 15 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno Vasco ha activado la "fase de emergencia" por riesgo de incendios ante el episodio de calor que sufre el País Vasco y la posibilidad de que pueda agravarse en las próximas jornadas. De este modo, se han establecido ya restricciones y prohibiciones, sobre todo, en el medio rural, rústico o no urbanizable de Álava.
El viceconsejero de Seguridad, Rodrigo Gartzia, junto al director de Atención de Emergencias y Meteorología, Ricardo Ituarte, y el responsable de la Agencia Vasca de la Meteorología, Euskalmet, José Antonio Aranda, han comparecido en rueda de prensa en Bilbao para anunciar que, a partir de este viernes, el Gobierno Vasco eleva a "fase de emergencia", en todo Euskadi, del Plan Especial de Emergencias por riesgo de incendios forestales.
La decisión va acompañada de una resolución del viceconsejero de Seguridad en la que se establecen restricciones y prohibiciones para determinados usos y actuaciones que puedan entrañar grave riesgo.
El Gobierno Vasco ha adoptado esta postura ante la prolongación en el tiempo del episodio de calor y la previsión del incremento del viento en las próximas jornadas, cuestión por la que ha mostrado "preocupación".
Desde Euskalmet han detallado que la DANA situada frente a Portugal está provocando que se estén batiendo "récords" de temperaturas que generan "estrés en la vegetación" y que suponen un "problema severo" si el viento se incrementa, algo que se producirá desde la noche de este próximo domingo.
De este modo, desde las 13.00 horas y hasta las 21.00 horas, se activa la situación de alerta naranja en las zonas 3 (de transición) y 4 (zona del eje del Ebro), en Álava. No obstante, la Dirección de Atención y Emergencias y Meteorología emitirá diariamente una resolución pública actualizando la situación y horario de las restricciones en cada una de las cuatro zonas en que se divide Euskadi.
De este modo, entre las 13.00 y las 21.00 horas de este viernes y también de mañana sábado queda prohibido en la mayor parte de Álava cualquier empleo del fuego, o actividades que puedan generarlo, como el uso de maquinaria en el entorno agroforestal susceptible de producir deflagración, chispas o descargas eléctricas.
También quedan prohibidos fuegos artificiales, petardos, otros artículos pirotécnicos y celebración de barbacoas, todos ellos incluso en suelo urbano y a menos de 300 metros de terrenos cubiertos por vegetación arbórea, arbustiva, de matorral o cualquier tipo de cultivo.
Además, está prohibido el uso de vehículos a motor de combustión en pistas forestales, parcelarias y cualesquiera otros lugares de tránsito fuera de carreteras asfaltadas, salvo acceso al puesto de trabajo o al lugar de residencia habitual y demás circunstancias de fuerza mayor. También se prohíbe atravesar, parar o estacionar estos vehículos en zonas con vegetación.
ALARMA ROJA
Ante la previsión de que la velocidad del viento se incremente, y dadas las altas temperaturas anunciadas para las próximas jornadas, desde el Gobierno Vasco se ha advertido de la posibilidad de que este domingo se tenga que declarar la situación de alarma roja por incendios forestales, que amplía las restricciones las 24 horas del día. La alarma podría además extenderse al resto de zonas de Euskadi: zona 1 Costera y la zona 2, Cantábrico interior.
Respecto a las temperaturas que se prevén durante el fin de semana, Euskalmet ha indicado que podrían alcanzar los 40-41 grados de media en la Llanada y Rioja Alavesa.
En la presente semana se han declarado un total de 38 incendios en Euskadi, de los que una decena han sido "relevantes" y seis han requerido medios aéreos. Además, el Gobierno vasco ha apuntado que se han recurrido a servicios de extinción de comunidades limítrofes.
La decisión adoptada este viernes contempla que los incumplimientos de las restricciones y prohibiciones puedan ser consideradas "graves o muy graves" y ser así sancionadas con multas que van desde los 1.501 hasta 30.001, en el primer caso, y entre 30.000 y 600.000 euros en el segundo caso.
Por último, desde el Gobierno Vasco se ha reconocido que la "nueva realidad de cambio climático" generan situaciones "que no hemos conocidos hasta ahora".