Afirma que los españoles no quieren "extremismos ni radicalidades", y el PSOE también tiene que reflexionar
MADRID, 7 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Partido Popular vasco, Alfonso Alonso, ha asegurado este martes que los españoles dijeron "rotundamente" que no querían un gobierno "de las tres derechas" con Ciudadanos y Vox, porque no quieren "extremismos ni radicalidades", y ha defendido que el PP está haciendo una reflexión tras los comicios, apuntando a que se tiene que parecer "a sí mismo".
En declaraciones en Antena3, recogidas por Europa Press, Alonso ha apuntado a que hay que entender el mensaje que transmiten las urnas. "Los españoles no quieren esos extremismos ni esas radicalidades, nosotros hacemos la reflexión y el PSOE también debería hacer esa reflexión", ha asegurado.
El exministro popular ha explicado que Vox "tiene su público", pero sus votantes "se habían hecho la ilusión" de que una alianza de "las tres derechas" podía funcionar. "Y no puede funcionar. Los españoles no han comprado la idea, no quieren ese gobierno, y lo han dicho con rotundidad y claridad", ha aseverado.
Por ello, tras la debacle electoral del 28 de abril, Alonso ha defendido que el PP tiene que tomar el "camino de la recuperación", añadiendo que "es más" que un partido de un "solo discurso". "El PP tiene que parecerse a sí mismo, no parecerse a ningún otro", ha subrayado el líder del PP vasco, quien ha defendido que es un partido "amplio" y con "otras referencias".
VOX Y EL "BLOQUEO" AL CENTRO DERECHA
Según Alonso, Vox ha dejado al centro derecha "dividido y bloqueado", lo que entiende que es una "magnífica noticia" para el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. No obstante, ha explicado que "lo mismo que viene muy rápido" el partido de Santiago Abascal, "a lo mejor se va muy rápido" también.
Preguntado por la ronda de contactos iniciada por Sánchez ayer en Moncloa con el presidente del PP, Pablo Casado, el exministro ha criticado que el líder del PSOE sigue sin aclarar si va contar con el apoyo para su Ejecutivo de los independentistas, por lo que ha puesto en duda su "credibilidad".