Dice que, si el estudio para la conexión con Castro lo hubiera impulsado el anterior Gobierno, José Luis Bilbao "hubiese aplaudido"
BILBAO, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -
El consejero vasco de Transportes, Iñaki Arriola, confía en mantener los ritmos de la Y vasca en el tramo guipuzcoano, que depende del Gobierno vasco, y continúa a "la espera de noticias" sobre los ajustes que se acometerán en el Ministerio de Fomento y sus posibles efectos en el proyecto de Tren de Alta Velocidad.
En una entrevista a ETB, recogida por Europa Press, Arriola destacó que hoy se pone la primera piedra del tramo Bergara-Antsuola, con lo que ya son seis los tramos que en Gipuzkoa están en ejecución.
"Nosotros, de lo que es nuestra encomienda, que es el ramal guipuzcoano, nuestro objetivo es seguir a avanzando en base a nuestra capacidad de gestión y con los ritmos que teníamos previstos", añadió.
El consejero añadió que, además, hay dos tramos, uno de los cuales ha salido ya a licitación y el otro se hará próximamente e insistió en que el objetivo es seguir avanzando en 2010 en base "a la planificación" realizada. "Esperamos poder mantener esta capacidad de gestión y ritmo de obras", aseguró.
Arriola señaló que los ramales vizcaíno y alavés dependen del Gobierno central y están "esperando noticias como todo el mundo a nivel de España" porque el Ministerio de Fomento todavía está "haciendo los deberes" en relación a los ajustes que va a acometer.
El consejero vasco indicó que el tramo guipuzcoano "va sustancialmente más retrasado" en su ejecución que los vizcaínos y alavés y señaló que el tramo francés está "más adelantado" en España que en Francia, dentro del Eje Atlántico. Arriola añadió que están decidiendo ya el trazado y su objetivo es que pudiera estar finalizado para 2020. "Con lo cual, nosotros vamos a ir sustancialmente más avanzados que nuestros vecinos franceses", agregó.
Por otra parte, se refirió a los estudios para la conexión ferroviaria de Bizkaia con Castro y la de Zumarraga con Eibar y aseguró que son "documentos de trabajo, de análisis".
Ante las diferencias con la Diputación foral de Bizkaia por el estudio de la conexión ferroviaria con Castro, señaló que "son temas estéticos". Arriola se mostró convencido de que si este estudio lo hubiera impulsado el anterior Gobierno, "el diputado general de Bizkaia hubiese aplaudido". "Se produce en un contexto político distinto y entonces hay que manifestar la discrepancia", agregó.
El consejero manifestó que, en ningún momento, han trasladado que sea un proyecto "prioritario, para hacer mañana", sino que se están analizando tres posibles alternativas.
Asimismo, defendió el proyecto de Metro para Donostialdea porque es "estratégico" y confía en que se sume al mismo la Diputación foral de Gipuzkoa.
PACTO SOCIAL POR LA VIVIENDA
En relación al Pacto Social por la Vivienda, que se firmará el próximo día 16, señaló que supone la definición de la política de vivienda en los próximos 15 años y que se basa "en el consenso".
"Creo que hemos conseguido un documento que condensa en líneas generales una política que podemos compartir con una gran parte de los agentes sociales y económicos para poder impulsar las políticas de cara al futuro", agregó.
Arriola señaló que hay, en la actualidad, muchos suelos destinados al desarrollo de vivienda "están parados" por la coyuntura y debido a que respondían "a un modelo financiero-económico" que en este momento "no existe". Por ello, defendió la necesidad de adoptar medidas "correctoras" para que esos suelos "tengan una oportunidad de desarrollo" y se pueda construir más vivienda protegida.
El consejero vasco destacó que uno de los objetivos es lograr que en los próximos 15 años se puedan desarrollar 90.000 nuevas viviendas, haciendo un "esfuerzo" para aumentar la vivienda de alquiler. En concreto, llegar al 40 por ciento de vivienda de alquiler en 2013 y en el 2025 al 50 por ciento.
Arriola señaló que los sorteos de las VPO "tampoco van a desaparecer del todo absolutamente", pero se establecerá un sistema mixto en el que se puedan establecer los criterios de valoración previa, para que sea "más justa" la fórmula de adjudicación.
Según explicó, se identificarán una serie de situaciones objetivas de necesidad que conllevarán "una serie de puntos" y, entre esos colectivos más necesitados, se hará un sorteo.
Arriola indicó que, en una primera fase, lo que se presenta es un Pacto social, pero se mostró abierto a que, en una segunda etapa, se alcance un pacto institucional en el que estén también las diputaciones y ayuntamientos.