BILBAO 10 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Bilbao, junto al Foro Bilbao para la Paz y la Convivencia y representantes de la corporación municipal, ha rendido homenaje este domingo, Día de la Memoria, a "todas las víctimas del terrorismo" y de la violencia política en un acto en el que se ha realizado una ofrenda floral en torno al monolito situado debajo de la pérgola del Parque de Doña Casilda.
En la conmemoración también se han dado cita la presidenta de las Juntas Generales de Bizkaia, Ana Otadui, y la presidenta del Bizkai Buru Batzar del PNV, Itxaso Atutxa.
Con el acompañamiento de la banda municipal, dos familiares de personas asesinadas por ETA han leído dos textos "de homenaje y recuerdo a las víctimas, uno en castellano ('El iris salvaje', de Louise Glück, Premio Nobel de Literatura de 2020) y otro en euskera, basado en un texto de Lucía Martínez Domínguez.
El acto se ha completado con la lectura de los nombres de todas las víctimas del terrorismo y de la violencia política en Bilbao y la ofrenda floral, en la que han participado representantes tanto del gobierno como de la corporación municipal y de varias instituciones, como las Juntas Generales.
El alcalde, Juan Mari Aburto, ha declarado a los medios de comunicación que este día pretende ser "un día en memoria de las víctimas, un día de empatía con las víctimas", en el que "el dolor y el sufrimiento que han tenido durante tantos años pueda ser, de alguna manera, paliado con el cariño de la sociedad".
"Un cariño que la mayoría de ellas no tuvieron en su momento", ha recordado Aburto, antes de añadir que esta jornada es, sobre todo, "un día de memoria". "No tenemos que olvidar lo ocurrido en este país, sobre todo para que jamás vuelva a ocurrir", ha sentenciado.
Asimismo, ha señalado que Bilbao "es una ciudad de valores" y que entre ellos está "la justicia y los derechos humanos", siendo el más importante "el derecho a la vida".
Por otro lado, tal y como ha señalado el Consistorio bilbaíno, el Día de la Memoria fue oficialmente instaurado en mayo de 2010 por las instituciones vascas, que acordaron celebrarlo el 10 de noviembre por ser este el día en el que "nunca se ha producido ningún atentado mortal".
Desde entonces, el monolito situado debajo de la pérgola del Parque de Doña Casilda (inaugurado en 2006) ha acogido los actos anuales en los que se recuerdan y honran a las víctimas del terrorismo y la violencia política con la excepción del año 2020 a causa de la pandemia del coronavirus.