BILBAO 23 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Colectivo de Víctimas del Terrorismo del País Vasco, Covite, ha interpuesto denuncia ante la Audiencia Nacional contra los presos de ETA Iñaki Igerategi e Ignacio Otaño, presos que fueron homenajeados el pasado 18 de febrero en la localidad guipuzcoana de Andoain después de cumplir prisión por facilitar información a la banda para asesinar al exjefe de la Policía Municipal Joxeba Pagazaurtundua y al empresario Inaxio Uria. Además, reclama que se les interrogue sobre su negativa a condenar el terrorismo de ETA.
Covite considera que, con el acto conmemorativo, se incurrió en un delito de enaltecimiento del terrorismo y humillación de las víctimas, penado en el artículo 578 del Código Penal.
Los denunciados son Igerategi y Otaño porque, según la asociación, sin su participación no habrían podido "realizarse los hechos delictivos". También extiende la denuncia a quienes organizaron y participaron en el acto conmemorativo.
En su escrito, al que ha tenido acceso Europa Press, el Colectivo de Víctimas del Terrorismo pide que se cite a declarar, en calidad de investigados, a Iñaki Igerategi e Ignacio Otaño, y se les interrogue, además de por las cuestiones que se estimen necesarias, "sobre su negativa a condenar el terrorismo de ETA y su pasado criminal".
Asimismo, solicita que se requiera a la Ertzaintza la comunicación en las que se anunciaba la manifestación o reunión para el día 18 de febrero, que supondrían los actos tributados a los reclusos, y que se remita oficio al Servicio de Información del cuartel de la Guardia Civil de Intxaurrondo.
HECHOS
En su escrito, Covite relata que el 18 de febrero de 2018 más de 200 personas --niños incluidos-- se dieron cita en Andoain para recibir a los presos de ETA Iñaki Igerategi e Ignacio Otaño, que recorrieron un pasillo formado por los asistentes, que les aplaudían mientras proferían cánticos a favor de la libertad de los reclusos de la organización terrorista. Además, se les bailó un aurresku de honor y se les entregó dos ramos de flores.
El Colectivo de Víctimas del Terrorismo recuerda que Igerategi y Otaño, detenidos en 2012, fueron condenados a seis años de prisión por haber facilitado información sobre objetivos de ETA, entre ellos, de Joxeba Pagazaurtundua, jefe de la Policía Municipal de Andoain, y por haber enviado cartas de extorsión en nombre de la banda.
La asociación destaca que, "como es habitual, en el País Vasco y Navarra los terroristas son recibidos como héroes en las poblaciones de las que son originarios", y esta vez "tocó el turno a Andoain", gobernada por EH Bildu.
En este sentido, señala que Maite Pagazaurtundua, hermana de Joxeba, pidió a la alcaldesa, Ana Karrere, que impidiera el homenaje a los presos de ETA "que habían pasado la información para asesinar a su hermano en esa misma localidad donde vivía". Además, subraya que el grupo municipal del PSE-EE denunció también "el silencio" de la regidora ante el homenaje.
Covite apunta que el día del acto conmemorativo miembros del PP vasco denunciaron los hechos en el mismo lugar en el que se celebraba la bienvenida y fueron "abucheados por la multitud que rendían honores a los terroristas".
Asimismo, indica que "esta denuncia ha tenido un gran impacto", creando "una lógica y generalizada alarma social ante una realidad tan grave como que terroristas de la organización que, con más violencia y durante más tiempo ha golpeado nuestro país, sean honrados en las mismas localidades en las que cometieron sus atrocidades".
En esta línea, puntualiza que, a "la indignación que estos hechos producen, se une a la estupefacción, ya que nada parecido sucede en ningún país civilizado" con "ningún tipo de terrorismo, como el yihadista, ni de criminales".
EN LUGARES PÚBLICOS
El colectivo denunciante apunta que, "durante el último año y medio se celebraron casi medio centenar de homenajes a terroristas de ETA excarcelados, algunos de ellos condenados por delitos de sangre". Según precisa, todos ellos se hicieron "en lugares públicos, incluidos frontones municipales, institutos públicos, centro de las ciudades y pueblos, el salón de plenos de un Ayuntamiento e incluso debajo del domicilio de las propias víctimas que el homenajeado había asesinado". "Todos los actos fueron ampliamente difundidos por asistentes y organizadores, dada la impunidad con la que se celebran", añade.
También manifiesta que, "a los homenajes, se suman otros actos de ensalzamiento del terrorismo de ETA encuadrados en fiestas populares o las denominadas 'jornadas de lucha', sumando más de 80".
La Asociación destaca que, "en esa macabra escenografía perfectamente diseñada por la izquierda abertzale, habitualmente figuran niños y niñas en primera fila, jóvenes a quienes se oculta premeditadamente las andanzas de los criminales y las vidas que han destrozado, y se les exhibe como modelo de comportamiento y ejemplo a seguir". "Se trata de un escenario más para la inculcación del odio y del culto al terrorista", asevera.
En este sentido, apunta que el Parlamento vasco, el pasado 22 de febrero, "mostró su rechazo explícito a los homenajes a miembros de ETA, al considerarlos contrarios a la defensa de los Derechos Humanos y por suponer una revictimación de las víctimas", mientras que la Cámara navarra lo hizo el pasado 11 diciembre de 2017 "en los mismos términos". "Representantes de PNV, PSE, PP y Podemos coincidieron en rechazar los homenajes a etarras por considerarlos indignos e inmorales, entre otros calificativos", dice.