En esta fase, que cuenta con un presupuesto de 13,3 millones de euros, se habilitarán dos nuevos tramos de adelantamiento
SAN SEBASTIÁN, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Diputación Foral de Gipuzkoa ha iniciado la segunda fase de las obras de mejora en la carretera GI-631, que conecta Azkoitia y Urretxu. Los trabajos abarcarán un tramo de aproximadamente 1,45 kilómetros. En esta fase, se habilitarán dos nuevos tramos de adelantamiento, uno en cada sentido, con el objetivo de mejorar la seguridad vial y la fluidez del tráfico.
La actuación cuenta con un presupuesto de 13,3 millones de euros (IVA incluido) y un plazo de ejecución de 31 meses. Este nuevo tramo da continuidad a las mejoras realizadas en la primera fase, inaugurada en abril de 2023.
La diputada general de Gipuzkoa, Eider Mendoza, que ha visitado este miércoles la zona, ha explicado que la intervención "ha supuesto un avance significativo en la accesibilidad y seguridad del acceso en la conexión entre dos comarcas".
Las mejoras beneficiarán a los conductores de los cerca de 3.000 vehículos que utilizan esta vía a diario, incluidos los vehículos pesados, que representan cerca del 10% del tráfico total.
"La GI-631 es una infraestructura clave para la comarca, ya que proporciona un acceso directo al Hospital de Zumarraga, el centro de referencia para la zona. Con esta obra estamos atendiendo una demanda histórica de los habitantes de Urola Garaia y Urola Erdia", ha subrayado Mendoza.
La mejora de la carretera GI-631, con una longitud total de 13 kilómetros, es parte de un amplio proyecto de infraestructura, cuya inversión global supera los 50 millones de euros.
ACCIONES MEDIOAMBIENTALES
La diputada general ha subrayado también la complejidad técnica de las obras, que se ejecutan "en un valle muy estrecho y con unos taludes muy verticales". Además, ha subrayado el esfuerzo "por minimizar el impacto medioambiental", tanto en el paisaje como en el cauce del río Urola.
Entre las medidas previstas, se retirará el aglomerado en dos curvas del trazado actual (PK 23+850 y PK 24+200), que quedarán fuera de uso tras la ejecución del proyecto, y se llevarán a cabo replantaciones en esas zonas. En la curva más al sur, se procederá a la demolición parcial de un muro para crear un talud que conecte el nuevo trazado con el cauce del río, facilitando una mejor integración paisajística.
Asimismo, se instalarán varios separadores de hidrocarburos para garantizar que las aguas pluviales vertidas al río sean lo más limpias posible, "contribuyendo así a la protección del ecosistema fluvial".
Además, se prevé la reutilización del material de excavación para la construcción de la nueva plataforma de la carretera, "reduciendo así el volumen de residuos generados por la obra, siempre que las condiciones lo permitan", ha apuntado.
MEJORA DE ACCESOS
El proyecto se desarrollará aprovechando "al máximo" la plataforma actual de la carretera, sin que las obras interfieran en el cauce del río Urola. Las intervenciones previstas incluyen la ampliación de la plataforma ganándole espacio a la montaña mediante excavaciones y desmontes en la ladera, así como la renovación del sistema de drenaje y la instalación de barreras de contención.
Con la inclusión de un carril adicional, la carretera alcanzará una anchura de 13 metros, limitados por el río Urola y la ladera. En esta fase se ejecutarán dos tramos de adelantamiento: uno de 275 metros en dirección Urretxu y otro de 475 metros en dirección Azkoitia.
Debido al espacio limitado para realizar las excavaciones, será necesario implementar tráfico alterno en la mayor parte de las obras para garantizar la seguridad. Tras las primeras semanas de labores preparatorias, la previsión es que las primeras afecciones al tráfico comiencen la semana del 11 de noviembre.
Desde la Diputación han explicado que cualquier corte total de la vía será comunicado con antelación a través de canales telemáticos de WhatsApp y Telegram. Para recibir estas notificaciones, los usuarios solo deberán buscar el canal "GI-631 OBRA" en ambas plataformas y suscribirse.