VITORIA, 23 (EUROPA PRESS)
El Gobierno Vasco analiza si los altercados cometidos en las últimas semanas y días en Bilbao, tanto en botellones como en actos de apoyo al rapero Pablo Hasél, están organizados, y ha afirmado que no tienen información sobre quién puede estar detrás de estos. En todo caso, ha vuelto a rechazar de forma "contundente" estos episodios violentos, y ha emplazado a desvincularlos del malestar que pueda haber en la ciudadanía por la crisis de la covid-19 o de debates como el modelo policial.
Tras la reunión del Consejo de Gobierno celebrada en Vitoria, el portavoz del Ejecutivo vasco, Bingen Zupiria, ha asegurado que los incidentes están siendo analizados por las unidades de investigación de la Ertzaintza, aunque en la actualidad no dispone de "ninguna información al respecto".
Zupiria ha señalado que en el Gobierno se han comentado los altercados causados por radicales en las últimas semanas en Euskadi en botellones y en actos en protesta por el encarcelamiento de Hasél, y ha recordado que el Lehendakari, Iñigo Urkullu, ha mostrado su "rechazo contundente" ante todas estas expresiones violentas.
De hecho la última vez que el Lehendakari las ha condenado fue ayer mismo, con motivo de los incidentes registrados el pasado domingo en Bilbao tras una marcha contra el encarcelamiento de Pablo Hasél.
El portavoz del Gobierno Vasco ha recordado las palabras de Iñigo Urkullu en las que mostró su "rechazo contundente" ante estos actos de violencia, que "constituyen una expresión de brutalidad y destrucción, que denigran el sentido de la dignidad humana, muy especialmente en quienes los protagonizan".
SIN MEZCLAR TEMAS
Bingen Zupiria ha mostrado, además, su convicción de que se hace "un flaco favor al análisis de estos hechos cuando se mezclan los comentarios sobre unos incidentes con comentarios de otro tenor".
"Cuando hablamos de los incidentes violentos, deberíamos fijar nuestra atención en ellos y deslindar esos debates de otros, como pueden ser el del modelo policial, del malestar ciudadano postpandemial o el de la crisis económica", ha añadido.
A su juicio, se trata de debates "completamente diferentes, que no tienen nada que ver entre sí". "Y creo que, a veces, no se hace bien cuando se mezclan", ha aseverado.