El proceso, en el que están acusados varios exdirigentes del PNV, queda visto para sentencia tras casi 11 meses de sesiones
VITORIA, 19 Dic. (EUROPA PRESS) -
El exdiputado foral Alfredo de Miguel, principal acusado por la presunta trama de corrupción urdida en torno a varios exdirigentes del PNV de Álava, ha mostrado su arrepentimiento por las cosas que haya podido hacer "mal" durante su trayectoria profesional y política, pero ha rechazado haber cometido delito alguno o haber obtenido un enriquecimiento "ilícito" por sus actividades.
De Miguel ha realizado este alegato en la última jornada del juicio que celebra la Audiencia Provincial de Álava en torno a esta presunta red de cobro de comisiones ilegales y adjudicaciones irregulares de contratos públicos, por la que están acusadas 26 personas, entre las que se encuentran varios antiguos dirigentes del PNV.
El ex diputado foral alavés, al que la Fiscalía considera el líder de la red, se ha acogido a su derecho a la última palabra antes de que el tribunal dejara el caso visto para sentencia, después de casi once meses de juicio.
De Miguel, que se enfrenta a una condena de 29 años y nueve meses de prisión por una veintena de delitos, ha afirmado que el de hoy no ha de ser un día de "reproches", sino de "confianza y esperanza".
ARREPENTIMIENTO "SINCERO"
"Sin duda, ha habido cosas que he hecho mal, me arrepiento sinceramente y, si pudiera volver atrás, no las haría. Pero pienso que jamás he cometido algún delito; y menos, de los que se me acusa", ha manifestado el presunto cabecilla de esta red de corrupción, que habría operado entre 2005 y 2009, hasta que una empresaria supuestamente extorsionada denunció el entramado ante la Ertzaintza.
El exdiputado alavés de Administración Local y antiguo 'número dos' del PNV de Álava ha asegurado que todos los servicios prestados por Kataia, la empresa que centralizaba las supuestas actividades ilegales de la red, están "acreditados" y que los ingresos de esta sociedad fueron "declarados" ante Hacienda.
Además, ha subrayado que tras sido investigado "de arriba abajo", ha quedado constancia de que no ha obtenido "enriquecimiento lícito" alguno. Alfredo de Miguel ha concluido su alegato con un mensaje de agradecimiento al apoyo que le han prestado familiares y amigos, a los que ha pedido "perdón" por el "daño y tristeza" que les haya podido generar.