Movimientos repetitivos, posturas forzadas y ruido, principales causas de enfermedad profesional en Euskadi

En 2022 ascendieron a 53 las enfermedades profesionales causadas por agentes cancerígenos, 48 de ellas por amianto

BILBAO, 24 Ago. (EUROPA PRESS) -

Movimientos repetitivos, posturas forzadas y ruido se mantienen año tras año como las principales causas de la enfermedad profesional en Euskadi, según recoge el último informe anual correspondiente a este tipo de patologías laborales elaborado por Osalan-Instituto Vasco de Seguridad y Salud Laborales, correspondiente al 2022.

En ese año se declararon en la Comunidad autónoma vasca 2.584 enfermedades profesionales, de las cuales 1.866 fueron enfermedades nuevas y 718 episodios de recaídas. En concreto, hubo 250 partes de enfermedad profesional más que en el año 2021, lo que supone un aumento del 11% respecto al ejercicio preferente.

La notificación de patologías profesionales nuevas se incrementó un 18% respecto al año anterior y las recaídas disminuyeron un 5%. Las declaraciones aumentaron en mayor medida en hombres, un 13%, frente al incremento del 7% en mujeres. Los nuevos casos aumentaron tanto en hombres (+19%) como en mujeres (+17%), y la disminución en el número de recaídas declaradas fue mayor en mujeres (-12%) que en hombres (-1%).

El estudio refleja que el 87% de los casos son por enfermedades causadas por agentes físicos y el otro 13% se reparte entre el resto de los grupos, con pequeñas variaciones interanuales. En concreto, el 66,5% de los nuevos procesos de enfermedad profesional notificados en el año 2022 correspondían a trastornos músculo-esqueléticos (TME) atribuibles a estresores biomecánicos del tipo movimientos repetitivos y posturas forzadas, porcentaje que descendió en 5,5 puntos respecto al 2021.

RUIDO

El ruido en el ambiente de trabajo fue el agente responsable de otro 9,2% de los nuevos casos y los trastornos de cuerdas vocales por esfuerzo sostenido de la voz supusieron otro 7,3% de las enfermedades profesionales. Las enfermedades profesionales nuevas causadas por este último agente aumentaron en 4 puntos porcentuales respecto al 2021 (pasando de 67 reconocidas a 160).

Las lesiones de piel por exposición por vía cutánea a sustancias sensibilizantes e irritantes, con otro 3,2%, completan el cuadro de principales agentes causales.

Por otro lado, el grupo de enfermedades causadas por agentes cancerígenos aumentó en 2022 hasta los 53 casos. De ellas, 48 tuvieron el amianto como agente, dos el cromo VI, una fue causado por aminas aromáticas, otra por Cadmio y otra por ácido cianhídrico, cianuros, compuestos de cianógeno o acrilonitrilos.

Otro de los grupos que aumentó en el 2022 fueron las enfermedades por inhalación de sustancias, donde las neumoconiosis pasaron de 13 casos a 57 (31 asbestosis y 21 silicosis). En cuanto a las enfermedades producidas por agentes agresores de la piel, agentes químicos y biológicos, se mantuvieron respecto al 2021, con 93, 58 y 40 casos, respectivamente.

MODIFICACIÓN DEL PATRÓN

Desde el año 2007 el patrón de tipo de enfermedad declarada se ha ido modificando. En los primeros años fueron las enfermedades de vainas tendinosas, inserciones musculares y tejidos blandos las que dominaban totalmente, pero a partir de la entrada en vigor de la nueva normativa se produjo una gran disminución de estas patologías y un fuerte incremento de las hipoacusias, que alcanzaron su máximo en el año 2011.

Desde el 2013 este patrón se ha vuelto a invertir, produciéndose un descenso continuado de las hipoacusias, con una tendencia al alza de las patologías que dominaban en los primeros años (enfermedades de vainas tendinosas, inserciones musculares y tejidos blandos).

Las neuropatías por presión también siguen una tendencia ascendente desde el 2014, con el descenso en el 2020 que se dio en todos los grupos debido a la pandemia por el SARS-CoV-2.

DIFERENCIA ENTRE HOMBRES Y MUJERES

Clasificando las enfermedades por grupos conforme al código de enfermedad profesional, Osalan constata que el patrón de enfermedades es diferente en hombres y mujeres, aunque se mantienen tendencias de años anteriores.

Como en años anteriores, en 2022 fueron más frecuentes en hombres que en mujeres (y por orden de frecuencia absoluta) los trastornos osteomusculares, las hipoacusias, las enfermedades del aparato respiratorio, los cánceres laborales, las enfermedades por agentes químicos y las enfermedades de la piel.

En mujeres las neuropatías periféricas por presión, como el síndrome del túnel carpiano, los trastornos de cuerdas vocales y las patologías causadas por agentes biológicos fueron mayores que en hombres. En el 2022 destacó el gran incremento de los trastornos de cuerdas vocales, sobre todo en mujeres, donde incrementaron de 67 a 155 casos.

En los tipos de enfermedad con breve periodo de latencia, la mayor proporción de afectados, tanto en hombres como en mujeres, estuvo en edades comprendidas entre 30 y 49 años (lesiones dermatológicas, nódulos de cuerdas vocales, enfermedades de vainas tendinosas y neuropatías por presión).

Por el contrario, en las patologías que requieren mayor tiempo entre la exposición y el efecto, como las hipoacusias o las neumoconiosis, la mayor proporción de afectados superaron los 50 años. Además, todos los cánceres profesionales reconocidos en el 2022 estuvieron por encima de los 50 años.

Al clasificar las enfermedades por grupos conforme al código de diagnóstico médico, se ve prácticamente el mismo patrón. Las mujeres tuvieron tasas de incidencia más elevadas que los hombres en neuropatías periféricas por presión (síndrome del túnel carpiano), trastornos de vías respiratorias superiores y en enfermedades infecciosas.

PROCESOS DE ENFERMEDAD PROFESIONAL Y DURACIÓN

Respecto a la duración de las bajas por enfermedad profesional, En hombres la duración del tiempo de baja se redujo en el año 2022 en todos los episodios, y, sobre todo, en los procesos con dos o más recaídas. Así, las diferencias entre hombres y mujeres fueron significativas en las recaídas, pero no en los episodios iniciales.

Por clase de enfermedad y teniendo en cuenta sólo los procesos cerrados, las bajas por patologías tumorales siguen siendo las de mayor duración, seguidas por las neuropatías por presión (túnel carpiano).

Las duraciones fueron muy similares a las del año anterior en las neuropatías por presión y las patologías musculotendinosas. En cambio, aumentaron de forma considerable la duración en los procesos tumorales y los trastornos de piel. Por el contrario, se redujo considerablemente la duración de los episodios respiratorios y los infecciosos.