BILBAO 14 Jul. (EUROPA PRESS) -
El paro sigue siendo el principal problema para el 51% de los vascos, aunque esta percepción ha experimentado un retroceso de 19 puntos en los tres últimos semestres, según los datos del último Euskobarómetro.
El director del Euskobarómetro, Paco Llera, ha hecho público este viernes la oleada de privamera de este informe, en función de las 1.200 entrevistas que ha realizado entre ciudadanos vascos entre los pasados 2 de mayo y 2 de junio.
Le siguen las "desigualdades sociales y bienestar", con un 19% y un incremento de 10 puntos, la situación política, citada en un 12% de los casos y con un incremento de 4 puntos, y la situación económica alcanza un 7%, tras retroceder 7 puntos en los últimos semestres.
Con menores porcentajes se sitúa la sanidad y la educación (5%), la vivienda (1%), la violencia, la pacificación, los presos o el problema vasco (1%), mientras que "quedan muy relegados, igualmente, la inmigración, el medio ambiente, los conflictos internacionales y la amenaza del terrorismo yihadista", según ha manifestado Llera.
Para dos de cada tres vascos, el 66%, 2017 está siendo un buen año en lo personal, mientras que el resto refieren una experiencia negativa (11%) o expresan escepticismo (23%), tras quince meses de estabilización en la recuperación del optimismo constatada a principios de año (+12 puntos) y de retroceso correlativo del pesimismo (-11 puntos).
Según ha destacado el director del Euskobarómetro, esta evolución supone "la recuperación del estado de ánimo previo al inicio de la crisis económica".
Aunque el clima de pesimismo sobre la economía vasca es del 28%, esta percepción experimenta un retroceso interanual de 20 puntos, en favor de optimistas (26%) y, sobre todo, escépticos (46%).
En relación a la situación económica estatal, en este último semestre y tras el significativo retroceso experimentado en los últimos tres semestres consecutivos (-21 puntos), retrocede el pesimismo mayoritario, que suma un 67%. Los optimistas alcanzan el 4% y los escépticos el 28%.
"Existe un contraste entre las situaciones del País Vasco y el Estado. Hay más optimismo ante las situaciones económicas y políticas de Euskadi y más pesimismo frente a las estatales, si bien es verdad que ambas mejoran. El balance semestral vuelve a ser de una alta satisfacción en lo personal, al tiempo que van aliviándose las condiciones de la crisis económica y descendiendo la preocupación por el empleo o las economías familiares", ha remarcado Llera.