BILBAO 17 Mar. (EUROPA PRESS) -
Un hermano del Árbol de Gernika ha sido plantado este viernes en la localidad gallega de Narón (A Coruña) en homenaje a las víctimas del bombardeo de Gernika con motivo del 80 aniversario del ataque fascista. El acto, organizado por la Asociación Memoria Histórica Democrática y el Ayuntamiento de Narón, ha sido presidido por la presidenta de las Juntas de Bizkaia, Ana Otadui, y el regidor, José Manuel Blanco.
El reconocimiento a las víctimas ha contado con la presencia de representantes de la Asociación Memoria Histórica Democrática, entre ellos su presidente, Manuel Fernández, y el historiador Enrique Barrera, según ha informado la Cámara vizcaína.
La ceremonia se ha convertido en un acto de reconocimiento "a todas las víctimas del fascismo, simbolizadas en las personas muertas hace ahora 80 años en el bombardeo de Gernika", ha señalado Ana Otadui. Ante un numeroso público, la presidenta de Juntas ha hecho un repaso del simbolismo que acompaña al Árbol de Gernika "aceptado y querido por todas las ideologías" como "icono universal de la democracia vasca".
En su intervención, y echando la vista atrás 80 años, Otadui ha tenido unas palabras de agradecimiento para el Gobierno de concentración que presidió el primer lehendakari, José Antonio Aguirre, que logró poner en marcha un Ejército vasco para "parar el avance fascista sobre Bizkaia", pero que no pudo, sin embargo, evitar el bombardeo sobre la villa foral un día de mercado. "Lo cierto es que la legión Condor engrandeció el simbolismo de Gernika como ciudad mártir", ha señalado.
"Hoy actualizamos ese grito contra todas las guerras, contra todas las violencias después de haber sufrido en Euskadi también décadas de la violencia terrorista de ETA", ha dicho Otadui, quien ha querido recordar las palabras del padre del galleguismo, Alfonso Rodríguez Castelao. Iluminado "por la influencia mágica" que le transmitió el árbol, Castelao vio en él "el sentido auténtico de la libertad, que sólo puede alcanzarse dentro de una auténtica democracia", ha dicho.
El alcalde de la "octava" ciudad de Galicia se ha sentido "orgulloso" de poder rendir homenaje a las víctimas del bombardeo de Gernika, unos acontecimientos que "marcaron para siempre la historia del pueblo vasco y que, debido a su relevancia y nefastas consecuencias, no debemos dejar caer en el olvido", ha indicado.
La ciudad de Narón y la localidad vizcaína de Gernika han quedado vinculadas para siempre. El roble formará parte del paisaje de la localidad gallega para recordar "aquellos lamentables hechos", y enseñar que el Árbol de Gernika es "símbolo de libertad, un derecho fundamental por el que todos y todas debemos trabajar día a día para mantenerlo más vivo que nunca".
El nuevo retoño crecerá frente al Pazo da Cultura uno de los edificios más emblemáticos de la localidad coruñesa, en recuerdo a las víctimas de la tragedia del bombardeo civil de las tropas alemanas e italianas sobre la villa foral, que se prolongó durante unas tres horas y que provocó un número indeterminado de muertes entre la población.
La Asociación Memoria Histórica Democrática fue la encargada de realizar las primeras gestiones para trasladar a este punto de Galicia un nuevo hermano del Árbol que preside la Casa de Juntas de Gernika, testigo que recogió después el Ayuntamiento de Narón y las Juntas Generales de Bizkaia.
Su portavoz, Enrique Barrera, ha significado que la plantación del retoño "refleja el respeto y cariño de los gallegos hacia los vascos" y su asentamiento en Narón "experimenta una transmutación, una metamorfosis, y se convierte en un icono o símbolo totémico de cariño y respeto a un valor transversal: la Paz", ha dicho.
El acto ha contado con la participación de la Banda de Gaitas y el grupo de Baile Tradicional Alxibeira, del Padroado da Cultura del Ayuntamiento de Narón, y se ha cerrado con la entrega por parte de la presidenta de las Juntas Generales de Bizkaia de un certificado de autenticidad del retoño.