Gobierno Vasco dice que el atentado de Manchester ha obligado a "alterar" la protección, pero no hay "un riesgo especial" en este evento
BILBAO, 30 May. (EUROPA PRESS) -
Un total de 280 agentes de la Ertzaintza, de la Policía Municipal y personal de seguridad privada velarán por la seguridad en el concierto de 'Guns&Roses' que se celebrará este martes por la noche en el estadio de San Mamés de Bilbao y al que se espera que asistan unos 40.000 espectadores.
En total serán 150 ertzainas los que directamente estarán destinados a la protección del evento, mientras que otros 50 serán policías municipales -habrá otros 70 de turno normal que podrán realizar labores de apoyo si fuera necesario-, y 80 efectivos de seguridad privada.
El Viceconsejero de Seguridad del Gobierno Vasco, Josu Zubiaga, ha afirmado que el atentado de Manchester ha obligado a "alterar" el plan de seguridad establecido, pero ha precisado que no hay información que apunte a que pueda haber "un riesgo especial" en este evento.
Zubiaga ha visitado esta mañana las instalaciones del estadio, junto con el concejal de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Bilbao, Tomás del Hierro, el Jefe de la Policía Municipal, Adolfo Alustiza, el Jefe de la División de Protección Ciudadana de la Ertzaintza, Josu Bujanda, y personal de Last Tour International, que organiza el concierto.
En declaraciones a los medios de comunicación, han realizado una serie de recomendaciones a los asistentes al espectáculo, entre ellas, que se utilicen de manera preferente los medios de transporte público o que se vaya a pie, acceder al lugar con suficiente antelación sobre la hora de inicio del concierto (a las 19.30 horas empiezan los teloneros y a las 21.30 la banda californiana), portar la documentación identificativa y no llevar bultos ni objetos voluminosos porque serán requisados.
También han pedido que se facilite el registro de bolsos y mochilas de pequeño tamaño y que se sigan las indicaciones facilitadas por el personal de seguridad privada y el personal de los servicios policiales. Está prohibido entrar en el recinto con bebidas alcohólicas y con elementos o instrumentos potencialmente peligrosos.
Ertzaintza, Policía Municipal y personal de seguridad privada están coordinados, tal y como ha explicado Tomás del Hierro. A lo largo de este mes de mayo se han celebrado diferentes reuniones en las que han participado el Ayuntamiento de Bilbao, los organizadores del evento, Policía Municipal y Ertzaintza, con el fin de establecer las bases del dispositivo de seguridad.
La actividad de los servicios policiales se centrará en asegurar los flujos de personas que accedan al estadio. Desde primeras horas de la mañana se hace una vigilancia específica del transporte público y de las calles periféricas al recinto.
El operativo implica la canalización del tráfico en las proximidades del estadio de San Mamés, y un amplio dispositivo de prevención de la seguridad pública en el que participarán Ertzaintza, Policía Municipal de Bilbao y personal de seguridad privada contratado por la organización.
La Guardia Urbana se encargará de la seguridad vial, como si fuera un partido de fútbol, con los cortes correspondientes. Del Hierro ha recordado que para acceder a la zona de San Mamés se puede ir en tranvía, cercanías, autobús o metro, y ha reclamado que se use el transporte público para que "todo se desarrolle en las medidas de seguridad mejores en este tipo de eventos". Además, ha pedido que se haga caso a los Cuerpos de Seguridad "una vez que se esté a punto de entrar al campo".
"TRANQUILIDAD Y PACIENCIA"
Por su parte, Josu Zubiaga ha solicitado "tranquilidad y paciencia" a los espectadores cuando se encuentren en la cola de espera y tengan que revisarles el bolso o aquella bolsa en la que puedan llevar algún objeto. "Que lo entiendan, que estamos para que el evento funcione bien, que todo el mundo disfrute, y podamos volver a casa perfectamente y satisfechos de lo que hemos vivido", ha explicado.
El viceconsejero ha dicho que cada vez que hay un evento "importante y masivo" como el concierto de Guns&Roses "se empieza a trabajar con tiempo y se establecen unos dispositivos de seguridad, que se van alterando en función de las diferentes informaciones y sucesos" que ocurran.
En este sentido, ha admitido que el atentado de Manchester ha hecho que estudien si hay que "alterar alguno de los dispositivos de seguridad". "Evidentemente se han alterado, pero igual que se pueden alterar por otros motivos", ha indicado.
En todo caso, ha aclarado que "las medidas de seguridad que se van a poner es la habitual en estos eventos", aunque "habrá cacheos razonables para evitar que se metan objetos peligrosos, habrá control de entradas, habrá control de la gente que vaya accediendo, incluso antes de que llegue a las líneas de entrada". "Es lo normal en estos eventos, con más o menos intensidad, pero eso es lo habitual en un evento masivo donde se juntan 40.000 personas", ha insistido.
Según ha asegurado, "no hay nada que haga de este evento algo especial más allá del propio evento". "No tenemos información de que haya un riesgo especial", ha reiterado.