Destaca que las modificaciones se deben realizar "en consonancia con los principios legales"
VITORIA, 18 Sep. (EUROPA PRESS) -
El lehendakari, Iñigo Urkullu, planteará el jueves durante el Debate de Política General del Parlamento Vasco la necesidad de "normalizar y pacificar" la política penitenciaria, "en consonancia con los principios legales" y tras el "hito" que supuso el desarme de la banda del pasado 8 de abril.
Urkullu dedicará una parte importante de su intervención parlamentaria del jueves a la convivencia y los derechos humanos, según se recoge en el resumen de su discurso facilitado por la Presidencia del Gobierno Vasco.
En este texto, el lehendakari reconoce que, tras "un periodo negro y traumático de violencia y terrorismo", aún quedan "importantes heridas de sufrimiento e injusticia por sanar".
El presidente del Gobierno vasco repasa los actos de reconocimiento específicos celebrados en los últimos meses para las víctimas del terrorismo, del franquismo y de abusos policiales.
Además, alude a la ley de reconocimiento y reparación de víctimas de vulneraciones de derechos humanos cometidas por las fuerzas policiales, que ha sido recurrida por el Gobierno central y que se encuentra suspendida por parte del Tribunal Constitucional.
SIN "OLVIDAR EL PASADO"
El lehendakari reafirma el compromiso de su Ejecutivo con el principio de que "todas" las víctimas han de recibir "el reconocimiento y reparación que merecen". "La memoria y el honor de las víctimas no deben quedar relegados por una mirada al futuro que olvide al pasado", añade.
En el resumen de la intervención del lehendakari se recoge una reflexión sobre el acto desarme de ETA del pasado 8 de abril. Iñigo Urkullu considera que aquel paso "definitivo y sin contrapartidas" ha constituido "un avance importante, indispensable, en el proceso del final ordenado de la violencia de ETA".
"AUTOCRÍTICA"
El presidente del Gobierno Vasco recuerda las medidas adoptadas por su gabinete para plantear "una nueva política penitenciaria y de reinserción", así como para promover procesos de "autocrítica".
En esta línea, se muestra partidario de una política penitenciaria "fundamentada en los principios legales de individualización, humanidad, reconocimiento del daño causado y reinserción".
Además, recuerda el nuevo 'Plan de Convivencia y Derechos Humanos' de su gobierno, asentado en siete ejes. Entre los objetivos prioritarios de dicho documento se encuentra el de propiciar un "final ordenado de la violencia y el terrorismo", y elaborar un 'mapa de la verdad' que sirva "para clarificar la realidad y el impacto que tuvieron el terrorismo y la violencia".
El plan recoge la necesidad de impulsar políticas públicas de víctimas "para que todas se sientan atendidas y reconocidas", así como el reconocimiento del Instituto Gogora "como espacio para compartir las políticas públicas de memoria".
"PACIFICAR" LA POLÍTICA PENITENCIARIA
Otro de los objetivos --según destaca Urkullu-- es "normalizar y pacificar la política penal, penitenciaria y de reinserción en consonancia con los principios legales".
También se impulsará un proyecto de educación en derechos humanos "orientado al compromiso con la paz, la diversidad y la solidaridad". El plan recoge medidas para la promoción de una cultura de convivencia, solidaridad, cooperación y derechos humanos.
En opinión del lehendakari, la aprobación de este nuevo documento ofrece la "oportunidad" de que la labor de la Ponencia de Memoria y Convivencia del Parlamento Vasco "de fruto", así como de que en este foro --al que el PP rechaza sumarse-- "cuente con la participación de todas las fuerzas políticas parlamentarias".
TERRORISMO INTERNACIONAL
En el ámbito del terrorismo internacional, Urkullu recuerda que el Ejecutivo autonómico ha creado un grupo de trabajo específico sobre este fenómeno, cuya labor está "avanzada" y cuyos resultados se presentarán a mediados de octubre.
El lehendakari destaca que el Gobierno Vasco "trabaja para contribuir a dar respuesta a la amenaza del terrorismo internacional", de forma que ya ha adoptado medidas para "la prevención de la radicalización violenta, la respuesta policial desde Euskadi, la integración intercultural e interreligiosa, y la contribución a los esfuerzos internacionales". Todas estas medidas se recogen en un plan específico que será presentado en el Parlamento autonómico.