MÉRIDA, 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
Unos 2.500 casos de ictus se producen en la comunidad autónoma de Extremadura al año.
Así, el 85 por ciento de las personas que lo padecen sobreviven a la enfermedad y un tercio necesitan rehabilitación intensiva. Además, un 70 por ciento de las personas sometidas a tratamiento neurorrehabilitador adecuado recuperan su independencia o cuidados mínimos.
De este modo lo ha puesto de manifiesto el Hospital Casaverde Extremadura, en Mérida, con motivo de la celebración el Día Mundial del Ictus, al hilo del cual ha celebrado este pasado martes, día 29, un acto con pacientes, familiares y profesionales para informar, visibilizar y promover la prevención y la rehabilitación de la enfermedad.
La presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola, y la consejera de Salud y Servicios Sociales, Sara García Espada, han acompañado a los pacientes en esta iniciativa y han compartido la suelta de globos naranja, color que simboliza la lucha para superar la enfermedad, al tiempo que han conversado durante unos minutos con las familias y los profesionales del centro.
"Es fundamental informar a la sociedad sobre la importancia de la prevención frente al ictus. Entre un 80 y un 90 por ciento de los casos se pueden prevenir siguiendo un estilo de vida saludable y actuando sobre estilos de vida y factores de riesgo modificables", ha declarado el director del Hospital Casaverde Extremadura, Francisco Javier Rubio.
Así, en el Día Mundial del Ictus, Casaverde ha lanzado la campaña 'Independizarse' con la que quiere poner en valor el proceso de recuperación de independencia personal tras superar la fase aguda de la enfermedad, informa la entidad en nota de prensa.
Además, la campaña incide en la importancia de prevenir la enfermedad desde edades tempranas, ya que en los últimos años se ha incrementado su prevalencia en un 25 por ciento en edades comprendidas entre 20 y 64 años.