LA CODOSERA (BADAJOZ), 16 Sep. (EUROPA PRESS) -
El arzobispo de Mérida-Badajoz, monseñor José Rodríguez Carballo, ha presidido este pasado domingo, día 15, en el Santuario de Chandavila de La Codosera (Badajoz) una misa multitudinaria en la que ha nombrado este enclave como Santuario Diocesano, paso previo para declararlo Santuario Nacional y, posteriormente, Santuario Internacional.
Los actos han comenzado con la lectura de la carta enviada por el Prefecto del dicasterio para la Doctrina de la Fe, Cardenal Víctor Manuel Fernández, firmado por el propio papa Francisco, en la que se reconocía la "riqueza espiritual" de este lugar, y el posterior decreto del arzobispo.
Finalmente se ha leído el nombramiento del nuevo rector del Santuario y Rodríguez Carballo se ha trasladado al camarín de la Virgen para hacerle entrega de un rosario bendecido por el papa Francisco y de una cruz pectoral que el papa Benedicto XVI le regaló en su día al actual arzobispo de Mérida-Badajoz, que puso a la Archidiócesis de Mérida-Badajoz y su pontificado en manos la Virgen de Chandavila.
Antes de comenzar la Eucaristía ha descubierto una placa conmemorativa de este día. La Eucaristía, en la explanada, ha estado concelebrada por el obispo emérito de Jaén, monseñor Amadeo Rodríguez Magro, y medio centenar de sacerdotes, algunos de ellos procedentes de Portugal.
Entre los asistentes se encontraba la consejera de Cultura, Turismo, Jóvenes y Deportes de la Junta de Extremadura, Victoria Bazaga, y el alcalde de La Codosera, Juan Manuel Gómez Herrera, informa en nota de prensa el Arzobispado de Mérida-Badajoz.
VISITA A LA VIDENTE
En su homilía monseñor José Rodríguez Carballo ha dado las gracias al Santo Padre y ha saludado, desde la distancia, a Marcelina, la primera vidente de la Virgen, que aún vive, y anunció su intención de ir a visitarla próximamente.
El arzobispo ha pedido que Chandavila siga siendo lugar de peregrinación, como según ha indicado le ha "pedido personalmente el papa Francisco", y ha recordado cómo empezó todo el día 27 de mayo de 1945, domingo, a las tres de la tarde, cuando una niña de 10 años, Marcelina Expósito, vio a la Virgen en un castaño y todo lo acontecido posteriormente.
Monseñor Rodríguez Carballo ha afirmado que la Virgen se hizo presente en "un pueblo pequeño y periférico", lo que prueba que la Madre de Dios y Madre "prefiere a los pobres y sencillos para dejarno el mensaje de paz, reconciliación, perdón y oración".
Por ello, ha pedido que hay que dejarse "reconciliar para ser elementos de reconciliación en nuestros ambientes".
HOSPEDERÍA
Asimismo, el arzobispo de Mérida-Badajoz ha realizado dos anuncios. El primero de ellos es que dentro de un año tiene intención de que se coloque la primera piedra de lo que será una hospedería para los peregrinos que acudan a Chandavila; y el segundo que cada sábado se celebrará una misa en portugués para los peregrinos de lengua portuguesa, que acuden con frecuencia.
Finalizada la misa, el presidente de la cofradía, José Lucio, le ha entregado al arzobispo un cuadro de la Virgen.
La procesión de las velas, con el rezo de los Siete Dolores, ha cerrado los actos.