ALANGE (BADAJOZ), 6 May. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil ha detenido a un vecino de la localidad pacense de Alange acusado de cultivar dos plantaciones de marihuana en una vivienda de este municipio, que había ocupado de manera ilegal y que estafa enganchada a la red eléctrica también de manera ilegal.
La investigación se inició cuando agentes de la Guardia Civil pertenecientes al Puesto de Alange detectaron la "actividad delincuencial" que pudiera estar llevando a cabo un vecino de la localidad, que se estaría dedicando a cultivar marihuana.
Con los dispositivos de servicio establecidos en torno a este hombre, se pudo ubicar en una vivienda de Alange, en la que reside de manera ilegal, el lugar donde supuestamente estaría cultivando las plantas.
Así, en la mañana de este pasado martes, coordinados con el Juzgado de Instrucción emeritense y con la colaboración de agentes de la Guardia Civil de la Usecic, se llevó a cabo el registro de la propiedad, donde se localizó en dos de sus estancias, sendas plantaciones interiores de marihuana con 646 plantas, "perfectamente acondicionadas, con todo tipo de elementos de iluminación, sistemas de ventilación y extractores, con el objetivo de permitir y crear las condiciones adecuadas para el desarrollo", según relata la Guardia Civil en nota de prensa.
Esta instalación contaba con enganches ilegales a la red eléctrica que abastecían de corriente a toda la maquinaria y aparatos utilizados para el cultivo de las plantas.
Por este motivo, con las pruebas incriminatorias, este hombre fue detenido como presunto autor de los delitos de cultivo y elaboración de droga, defraudación de fluido eléctrico y se le instruyó además diligencias por la ocupación ilegal de la vivienda.
Las diligencias que han sido entregadas junto al responsable de la plantación en el Juzgado de Instrucción que entiende de este asunto.
Destaca la Guardia Civil que esta actuación se enmarca en el Plan de respuesta policial para luchar contra el cultivo y tráfico de cannabis desarrollada a nivel nacional por la denominada 'Operación Miller', dirigida principalmente a detectar y erradicar grupos organizados dedicados a estas actividades ilícitas, que pueden tener conexión con la comisión de otros delitos, como el blanqueo de capitales, la trata de seres humanos o delitos violentos.