La empresa azucarera agradece a la Junta y al Ayuntamiento de Mérida su "esfuerzo" para facilitar su llegada a la región

   Señala que aún quedan cuestiones "fundamentales" que deben ser resueltas, como es el modelo energético de la planta

   MÉRIDA, 13 Dic. (EUROPA PRESS) -

   La empresa azucarera que plantea instalarse en Mérida ha agradecido "el esfuerzo y el compromiso" tanto de la Junta de Extremadura como del Ayuntamiento de Mérida, quienes han trabajado "de manera decidida" para agilizar los trámites y facilitar su llegada a la región.

   Así, el proyecto para construir una fábrica de azúcar de remolacha en Mérida ha concluido los trámites administrativos necesarios en esta primera fase tras la publicación de la Declaración de Impacto Ambiental y de la Autorización Ambiental Integrada, así como la concesión de la licencia municipal de construcción en los próximos días.

   En este sentido, se ha constituido la sociedad mercantil española Ibérica Sugar Company, con domicilio social y fiscal en Mérida, para continuar avanzando en el desarrollo del proyecto, según ha informado en nota de prensa la empresa azucarera.

   También, durante estos últimos meses se han mantenido conversaciones con los agricultores de la región, en las que se ha podido constatar "su interés en poder contar con un cultivo rentable y alternativo a los que actualmente se llevan a cabo en la región".

   Igualmente, la empresa ha agradecido a los agricultores extremeños su colaboración "imprescindible y su interés" para que el proyecto pueda instalarse en España.

   En esta línea, una vez superados estos primeros trámites administrativos, la empresa ha señalado que aún quedan cuestiones "fundamentales" que deben ser resueltas, como es el modelo energético de la planta, para el que aún se buscan "soluciones viables".

   Además, hay que tener en cuenta que "la regulación energética española encarece los costes de producción, lo cual podría suponer un obstáculo decisivo que impediría que el producto fabricado en España pudiera competir con las importaciones de otros países de la UE".

   En estos momentos, se analizan diversas alternativas posibles para el suministro eléctrico con el marco regulatorio actual. En este sentido, la empresa agradece el apoyo de la Junta de Extremadura en las gestiones que se hacen a todos los niveles.

   La decisión final sobre la ubicación de la planta se podrá tomar cuando estén resueltos aquellos "aspectos fundamentales" que afectan al proyecto, pues la empresa maneja dos localizaciones, una en Mérida y otra en Reino Unido.

DATOS DEL PROYECTO

   El proyecto de Mérida plantea la construcción de una fábrica con una inversión que podría alcanzar los 400 millones de euros, además la planta ocuparía un área de 59,3 hectáreas en el polígono industrial Expacio Mérida.

   Asimismo, contaría con la tecnología y los procesos "más avanzados y

   energéticamente eficientes del mundo" y su capacidad de transformación podría llegar hasta los 5,4 millones de toneladas de remolacha al año, con las que se producirían unas 800.000 toneladas de azúcar blanca.

   España importa más de un millón de toneladas de azúcar al año de

   otros países, de modo que esta planta permitiría sustituir las importaciones de azúcar por producto nacional.

   Además, en su actividad, la planta podría generar un empleo directo de "unos 200 puestos de trabajo", a los que se añadiría el empleo indirecto creado en la agricultura y en el sector del transporte, por lo que el objetivo es que tres cuartas partes de la superficie necesaria de cultivo de remolacha (varias decenas de miles de hectáreas) se sitúen en Extremadura.

   La promotora del proyecto es la empresaria Hassa Jamal Al-Ghurair, hija de Jamal Majid Al-Ghurair, fundador y director general de Al-Khaleej Sugar, propietaria de la mayor fábrica de azúcar del mundo, que está ubicada en Dubái (Emiratos Árabes Unidos) y produce cada año

   más de 1,5 millones de toneladas de azúcar, exportando el 80 por ciento de su producción a 48 países.