CÁCERES 12 Sep. (EUROPA PRESS) -
Unas 180 personas de relevancia científica y académica procedentes de 23 países de Europa, Iberoamérica y Estados Unidos, participarán en Cáceres en el II Congreso Internacional de Ordenación Territorial y Gestión Ambiental que estudiará, entre otras cuestiones, cómo influye la planificación del territorio a la hora de afrontar catástrofes naturales como huracanes o inundaciones.
El congreso está organizado por el Departamento de Arte y Ciencias del Territorio de la Universidad de Extremadura (UEx) y la Fundación Internacional para la Sostenibilidad Ambiental y Territorial (Fisat), y se celebrará del 9 al 11 de octubre en la capital cacereña.
El profesor de la UEx y coordinador del congreso, Julián Mora Aliseda, ha explicado la importancia de este tema porque "la ordenación del territorio está presente cada vez más en todos los lugares", ha dicho en la presentación de este encuentro.
"Hoy estamos escuchando permanentemente en los medios de comunicación los efectos del huracán Irma y del terremoto de México. Le atribuimos la designación de catástrofes naturales cuando, en realidad, lo que ha habido es una inexistencia de políticas de ordenación del territorio para una localización óptima de las ciudades", ha reiterado.
Por ello, Mora considera que la ordenación del territorio "es un instrumento de primera magnitud para mitigar esos efectos" y, al mismo tiempo, sirve para introducir elementos de gestión ambiental. "Es algo tan básico como intentar compatibilizar los recursos naturales con un uso adecuado de los mismos", subraya el profesor.
Así, el II Congreso Internacional de Ordenación Territorial y Gestión Ambiental, continuidad del que el pasado año se celebró en Perú, pretende dotar a las instituciones y administraciones de una serie de herramientas avanzadas, tanto desde el punto de vista científico-técnico como jurídicas, conformadas por normas, programas, directrices y planes, que orientan y regulan las actuaciones y procesos de asentamiento sobre el territorio, integrador y coordinador de las políticas públicas para corregir o mitigar los impactos a través de instrumentos adecuados de Planificación Territorial y Gestión Ambiental.
En estos momentos de variabilidad climática con grandes impactos ambientales (inundaciones, sequías, deslizamientos, huracanes, terremotos, etc...) "se hace más necesario que nunca definir y delimitar los espacios geográficos según sus aptitudes, para minimizar estos impactos", señaló.
Por su parte, Eduardo Blanco Morcillo, administrador de la empresa B.M., una de las principales patrocinadoras del evento, ha destacado que "la ordenación territorial y medioambiental son, cada vez más, actores principales en los negocios, sobre todo en la puesta en marcha y desarrollo de negocios relacionados con las telecomunicaciones".
Mientras, el secretario técnico del congreso, Jacinto Garrido, ha señalado que "la asistencia de estas personas relevantes propiciará el intercambio de ideas para la innovación en la gestión territorial y medioambiental".
FACTORES FISIOGRÁFICOS Y ANTRÓPICOS
El motivo de abordar las cuestiones ambientales y territoriales en el II Congreso Internacional, es que el territorio es el espacio donde se plasman no sólo los factores fisiográficos y naturales (geomorfología, geología, clima, hidrografía, vegetación y fauna), sino también los antrópicos (sistemas de poblamiento, usos del suelo, red de infraestructuras y equipamientos, estructura socio-económica, identidad cultural y el marco político-institucional).
El territorio, por tanto, es la base sobre la que se asientan todas las actividades humanas, que a su vez lo modelan y alteran en función de su desarrollo tecnológico o de sus aptitudes (vocación del territorio para determinadas actividades agrícolas, mineras, forestales...), modelo económico, esquemas culturales y densidades demográficas, informa la UEx en nota de prensa.
En el territorio se encaja también el Medio Ambiente, por lo que es objeto de intervención política para impulsar, controlar o reorientar las dinámicas espaciales tendentes hacia una mejora de las condiciones de vida de los ciudadanos, incluyendo la preservación ambiental a través de la compatibilidad entre la economía y el uso racional de los recursos naturales.