Se representa el jueves 21 de marzo a partir de las 20,30 horas desde la Plaza Mayor hasta San Mateo
CÁCERES, 12 Mar. (EUROPA PRESS) -
Más de 250 personas entre actores, bailarines y figurantes, participan en la Pasión Viviente de Cáceres que se representa el jueves, 21 de marzo, para rememorar las últimos días de Jesucristo, cuyo personaje será encarnado este año por el actor Máximo Leal. La parte antigua de la ciudad se convertirá en el Jerusalén de hace 2.000 años con 26 escenas repartidas por calles y plazas, en esta representación que el año pasado vieron unas 11.000 personas.
La cita partirá a las 20,30 horas en la Plaza Mayor con la escenificación de la entrada de Jesús en Jerusalén por el Arco de la Estrella. En la plaza Conde de Canilleros (frente al palacio de Moctezuma) tendrá lugar la oración en el huerto y el prendimiento. En la plaza de Santa María se celebrará el juicio de Caifás y el Sanedrín y allí se incorpora también una novedad en la que cobra protagonismo el personaje de Judas y su "arrepentimiento".
La plaza de San Jorge volverá a ser el escenario del encuentro con Pilatos, el interrogatorio de Herodes y la sentencia a muerte para comenzar el Vía Crucis por los adarves hasta llegar a la plaza de San Mateos, donde tendrá lugar, hacia las 23,30 horas, la crucifixión representada de una forma contemporánea y visual con haces de luz en forma de cruz.
Los detalles de esta Pasión Viviente se han presentado este martes por parte del director artístico Marcos Yépez; el actor que hará de Jesucristo, Máximo Leal; el presidente de la Asociación Pasión Viviente, Enrique Harto, y el alcalde de Cáceres, Rafael Mateos.
Yépez ha destacado el reto que supone trasladar a la parte antigua de la ciudad las últimas horas de la vida de Jesús en forma de metáfora, y ha recomendado a los asistentes a que elijan un lugar para ver alguna de la escenas, ya que es prácticamente imposible poder verlas todas por las dificultades de moverse por el recinto.
"Los cacereños y turistas van a disfrutar de una manera esplendorosa de esta producción, porque La Pasión Viviente de Cáceres se caracteriza por ser única", ha destacado Yépez, que ha resaltado la carga dramática de esta representación que se logra "con la interpretación textual y gestual, unida a la música, a la voz, y a la luz".
Por su parte, el actor Máximo Leal ha explicado que interpretar a Jesucristo le ha permitido encontrar nuevas facetas personales. "He querido construir un Jesús humano, un hombre con su luz y su sombra, con su vulnerabilidad, como cualquier humano, y a la vez a alguien divino, trabajando su misticismo, su espiritualidad", ha indicado.
"Mi trabajo toma mucho de la danza teatro butoh, una danza de origen japonés, con mucha filosofía, espiritualidad, que se concentra en destruir el ego, en conectar con tu cuerpo interno, en buscar la belleza de la imperfección, de transformar momentos fuertes, momentos dolorosos de la vida en algo bello, la belleza de la imperfección", ha resaltado Leal.
Así, ha recordado que esos últimos momentos de Jesús "son muy dolorosos, tanto a nivel físico como psicológico, pero a la vez es un sacrificio para purificar". "Espero que el espectador pueda conectar con mi propuesta de este personaje", ha deseado.
El presidente de la Asociación Pasión Viviente de Cáceres, Enrique Harto, ha explicado que se empezó a trabajar en esta edición el pasado mes de julio para llegar al día 21 de marzo en todo su esplendor. Harto ha recordado que la idea de crear una Pasión Viviente en la ciudad fue "el sueño de César García González", que fue la persona que concibió el texto y que situó cada escena en cada entorno de la parte antigua.
"Es un recuerdo que tenemos y una deuda que tenemos todos los cacereños con César", ha señalado Harto, que ha recordado que el evento se retransmite por la paltaforma online tusemanasanta.com, para que se pueda ver la totalidad de la obra en directo.
Además, este año el 21 de marzo coincide con el Día Mundial de las Personas con Síndrome de Down por lo que miembros de la Asociación Down Cáceres colaboran en la representación de la Pasión Viviente, que volverá a contar con las patrullas romanas de Mérida.
CITA ÚNICA Y MÁGICA
Por su parte, el alcalde de Cáceres, Rafael Mateos, ha destacado que la Pasión Viviente "es una cita única y mágica en un entorno inigualable como es nuestra Ciudad Monumental" y "una de las citas señeras dentro del calendario cofrade y cultural de la ciudad, y que refuerza nuestra Semana Santa".
El regidor municipal ha destacado que la Pasión Viviente "es un ejemplo de implicación de la ciudadanía, porque son miles los cacereños involucrados en su puesta en escena y también de cómo nuestro casco histórico es un espacio vivo, dinámico, capaz de acoger eventos de todo tipo".
Cabe destacar que la Pasión Viviente cuenta con 12.000 euros de presupuesto, de los que 6.000 los aporta el Ayuntamiento de Cáceres a través del Consorcio Cáceres Ciudad Histórica, que se destinan a iluminación, sonido, montaje de escenarios o el transporte de la centuria romana que viene desde Mérida. También recibe apoyo de instituciones privadas y las fundaciones Tatiana, Mercedes Calles y Valhondo.