En Extremadura existen unos 500 árboles por habitantes, lo que supone cinco veces más que la media nacional
MÉRIDA, 12 Oct. (EUROPA PRESS) -
La valoración económica de la superficie forestal extremeña supera los 13.900 millones de euros, de acuerdo con sus aspectos productivos, recreativos y ambientales.
Así se pone de manifiesto en el tercer Inventario Forestal Nacional, elaborado por el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino (MARM), del que informa la Junta de Extremadura en una nota de prensa en la que destaca que el resultado de esa valoración económica de los montes de Extremadura "demuestra que, aproximadamente, más de la mitad del valor total corresponde a los aspectos ambientales", mientras que la otra mitad se reparte prácticamente por igual entre los aspectos recreativos y productivos.
Así, explica que la valoración económica de la superficie forestal extremeña realizada en el citado inventario distingue tres aspectos. Un aspecto productivo, que "expone el valor del monte como generador de productos forestales que tienen precio de mercado", para lo que se ha calculado el valor económico finalista de capitalización de 5 productos forestales, que son madera, pastos caza, corcho y frutos (castaña y piñón).
Por su parte, el aspecto ambiental "representa el valor ecológico de los sistemas forestales, como 'almacén' de biodiversidad", formando parte de procesos ecológicos esenciales para la vida, constituyendo refugios botánicos, biotopos y hábitats esenciales para la fauna, integrándose en los ecosistemas y los paisajes de los que forma parte. También destaca el carácter protector de los montes para conservar los suelos y mejorar la calidad del agua.
Por último, el aspecto recreativo "refleja el valor de los sistemas forestales como lugares de recreo y ocio", y es el resultado del valor económico de las áreas recreativas y del valor contingente del paisaje, medido por la satisfacción que produce a los usuarios.
Estos datos forman parte de un estudio sociológico elaborado por la Consejería de Industria, Energía y Medio Ambiente de la Junta de Extremadura "para conocer de primera mano la opinión de la sociedad extremeña y del sector sobre la situación del monte y el medio natural y sus previsiones de cara al futuro".
INFORME EXTREMEÑO
Según los datos aportados por el Gobierno regional, el trabajo ha sido realizado por un equipo técnico especializado, integrado por sociólogos expertos en estudios de opinión y técnicos especialistas en medio natural y forestal, así como diferentes agentes sociales y económicos que han colaborado con su experiencia sobre la situación del monte, en el marco de la Primera Revisión del Plan Forestal de Extremadura, y con la intención de contar con la más amplia participación ciudadana posible a la hora de planificar la política forestal regional.
Para ello, se han realizado 938 entrevistas, directas (cara a cara o a pie de calle) entre particulares, y de los resultados obtenidos se concluye que casi todos los encuestados consideran importantes todas las funciones forestales, aunque el aspecto ambiental es el más importante para ellos, seguidas de las funciones productivas y, en último lugar, las funciones recreativas o sociales.
Asimismo, casi dos tercios de los extremeños muestra una elevada preocupación hacia los problemas del monte y el medio natural. El 62,5% reconoce estar preocupado o muy preocupado, fundamentalmente entre los habitantes de las zonas urbanas.
A pesar de ello, dos de cada tres extremeños no están dispuestos a pagar por la conservación e incremento de los montes y del medio natural. El 64% son contrarios a aportar alguna cantidad de dinero, un dato que "contrasta con el resto de la sociedad española, que sí estaría dispuesta a contribuir a la conservación de los espacios forestales o naturales con una media de 60 euros por adulto".
LOS JÓVENES, MÁS OPTIMISTAS
Del estudio se desprende además que la sensación que perciben los extremeños sobre el monte depende, principalmente, de su edad y de su proximidad a este entorno, de tal forma que más de la mitad (51%) opina que su estado es bueno o muy bueno, mientras que casi la otra mitad (49%) piensa que es malo o muy malo. En este caso, los jóvenes son más optimistas y, por el contrario, los mayores de 65 años opinan al revés.
Además, los encuestados en los municipios pertenecientes a los estratos forestal y agroforestal tienen una percepción de la situación más positiva que los residentes en los estratos agrícola y urbano.
SUPERFICIE EN AUMENTO
En cuanto a la superficie forestal, el 75 por ciento cree que no aumenta, el 47 por ciento considera que la superficie forestal arbolada es abundante, mientras que el 46 por ciento opina que es escasa.
Sin embargo, y según destaca la Junta la realidad es que, aproximadamente, el 70% del territorio regional extremeño está constituido por terrenos forestales, es decir, terrenos rústicos que no están ni cultivados ni urbanizados, en donde la intervención humana es menor y, en la mayoría de las veces, escasa o nula.
Además, la superficie forestal extremeña ha aumentado medio millón de hectáreas, lo que supone un incremento del 20 por ciento, sólo durante la última década, principalmente por repoblaciones forestales y actuaciones de mejora ambiental y reforestación.
En cuanto a la realidad de la superficie forestal arbolada en Extremadura, según el tercer Inventario Forestal, es que ésta ocupa cerca de 2 millones de hectáreas, un 70% del total de la superficie forestal extremeña. De lo que se desprende que casi la mitad (49%) del territorio extremeño está más o menos arbolado.
Más de 1 millón de hectáreas son bosques adehesados, mientras que más de 100.000 hectáreas son de arbolado disperso. El resto, más de 800.000 hectáreas, son bosques más o menos densos.
Asimismo, en la última década, la superficie arbolada también ha aumentado, un 32%, medio millón de hectáreas. El aumento es más significativo en la provincia de Cáceres, que con más de un millón de hectáreas arboladas se convierte en la provincia española con mayor superficie arbolada, seguida de Badajoz, Cuenca y Huelva.
En este incremento notable de bosque a costa de cultivos y monte desarbolado (matorrales y pastizales) ha contribuido considerablemente la expansión de frondosas que se han extendido bastante más que las coníferas, contribuyendo así al proceso de renaturalización forestal. De este modo, los datos confirman que en Extremadura hay unos 600 millones de árboles, es decir, se corresponde con unos 500 árboles por habitante, lo que supone casi 5 veces la media nacional (110 pies/habitante).
CONTACTO CON LA NATURALEZA
Finalmente, la encuesta destaca que la principal motivación de los extremeños para visitar el monte "es el contacto con la naturaleza y la posibilidad de pasar un día al aire libre, principalmente para hacer senderismo o excursiones, a pie o en bicicleta".
Así, un 61,7% de las respuestas señalan la posibilidad de pasar un día al aire libre, mientras que el 10,9% indican la práctica deportiva como motivo principal de su visita y alrededor del 7% de las personas entrevistadas visitan el monte por cuestiones de trabajo. Para practicar la caza o pesca fue la respuesta del 5,5% de los entrevistados; el senderismo fue elegido por el 4,3% y, la observación de la fauna y flora, por el 2,6%.
Por otra parte, uno de cada cuatro encuestados, cerca del 25%, afirma que visita el monte varias veces a la semana. Más del 21% de los ciudadanos de Extremadura lo visita tres o cuatro veces al año y casi el 7% nunca visita el monte.
Y, aunque la mayor parte prefiere ir a la playa (37%), fundamentalmente más las extremeñas que los varones, un grupo considerable (30%) prefiere el monte para pasar sus vacaciones o ratos de ocio.