El PPdeG reprueba sus intentos de sacar "rédito político" y reivindica que la Xunta está actuando sobre los daños causados por los incendios
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los portavoces parlamentarios de En Marea y PSdeG, Luís Villares y Xoaquín Fernández Leiceaga, respectivamente, han reclamado este lunes la dimisión del director xeral de Ordenación Forestal, Tomás Fernández-Couto, para lograr un cambio en la gestión de los montes gallegos y poner freno a los incendios.
En primer término, en rueda de prensa, el socialista ha defendido que se deben extraer "lecciones de interés" de Portugal, donde la ministra de Administración Interna presentó su dimisión como consecuencia de la tragedia de los fuegos, y ha apuntado a quien ha tenido la responsabilidad de la política forestal y contraincendios en Galicia durante más de dos décadas con gobiernos del PP.
Así pues, ha requerido la marcha de Fernández-Couto para que se pueda poner en marcha otra política forestal, pues la falta de ordenación y de una gestión sostenible de los montes gallegos es la que está, como ha dicho, tras la mayoría de los incendios que se suceden en Galicia desde hace "muchos años".
De igual modo, ha demandado la dimisión de la conselleira de Medio Rural, Ángeles Vázquez, por ser el cargo "formalmente responsable" de la lucha contraincendios y de la política forestal. Eso sí, ha dejado claro que no tendría "sentido" que su marcha no estuviese ligada a la del mencionado director xeral. Por tanto, a su entender, debe ser "un dúo, un paquete de renuncias".
"RESPONSABILIDAD"
A renglón seguido, en una comparecencia posterior, el portavoz de En Marea se ha sumado a la petición de dimisión de Fernández-Couto, desde el convencimiento de que la política forestal de Galicia debe "cambiar radicalmente".
Es por ello que ha avanzado que no sólo solicitará que sea destituido, sino que también demandará que "otras personas" asuman "sus responsabilidades" por lo ocurrido la semana pasada, cuando ardieron más de 35.000 hectáreas.
Dentro esa "extensa petición de responsabilidades" que ha avanzado, el portavoz de la formación rupturista ha exigido también "el cese fulminante" del director de la CRTVG, Alfonso Sánchez Izquierdo, por la "desinformación intolerable" que practicaron los medios públicos.
"NO ESTABA PERFECTO"
En paralelo a la petición de dimisiones, Leiceaga ha rechazado la idea que "vende" el PP de que "todo funcionó correctamente" durante la ola de incendios y de que no hubo "ningún problema" en el centro de coordinación.
Tras desmontar con ejemplos ambas cuestiones, al poner de manifiesto que un empresario denunció que tuvo que llamar "seis veces" al 112 hasta ser atendido y el retraso en la declaración de las zonas de atención prioritaria por proximidad de las llamas a viviendas, ha evidenciado que el dispositivo tampoco "era perfecto" porque había mucho personal que no estaba operativo.
En cuanto a la versión del "terrorismo incendiario", ha criticado que la Xunta trate de mantener que existe "una trama organizada", algo negado por el propio fiscal de Medio Ambiente, Álvaro García Ortiz.
"No se puede banalizar. Hay causas complejas, estructurales y que interpelan a todas las administraciones", ha recalcado el diputado del PSdeG, para quien, no obstante, la base de todo se encuentra en "la falta de ordenación y de una gestión sostenible del monte". "Ahí es donde hay que incidir", ha sentenciado.
SACAR CONCLUSIONES
Dicho esto, ha pedido que el Parlamento tenga "un papel central" en el análisis de lo ocurrido y ha lamentado que la "estrategia" del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, pase por abordar el asunto "en un pleno ordinario en medio del debate presupuestario".
Frente a ello, ha recordado que Portugal, tras la tragedia de Pedrógão Grande el pasado mes de junio, puso en marcha una comisión técnica que sacó "unas conclusiones muy interesantes" y que "lamentablemente", no se pudieron poner en marcha antes de esta nueva ola de incendios.
MANIFESTACIÓN
Adicionalmente, preguntado acerca de la ausencia de su partido en la manifestación del domingo en contra de la Ley de fomento empresarial y para protestar por los incendios, Leiceaga ha circunscrito su ámbito de decisión a la Cámara gallega. En O Hórreo, ha evocado, los socialistas votaron en contra de esa normativa.
Cuestionado también Luís Villares al respecto, ha rechazado profundizar en la postura del PSdeG y ha reivindicado que su grupo acudió para mostrar su rechazo a ambas cuestiones.
Así, ha señalado, la formación rupturista se opone a una ley que "endurece las condiciones de vida en el rural" mientras "facilita el expolio de los recursos naturales" y "apuesta por la industria extractiva en vez de por la industria sostenible"; y denuncia "abandono e incompetencia" de la Xunta en sus deberes de "asistir e informar" sobre los incendios.
Prueba de ello, ha señalado, es que hay alcaldes con los que todavía no se ha puesto en contacto. "No es un desbordamiento puntual por una emergencia", ha reprobado.
"RÉDITO POLÍTICO"
Finalmente, el portavoz parlamentario del PPdeG, Pedro Puy, ha reprobado que la oposición intente sacar "rédito político" de lo ocurrido, hasta el punto de convocar una manifestación antes de que se apagasen todos los incendios.
En el lado opuesto, ha destacado que la Xunta está "actuando sobre las consecuencias" de esos fuegos, al haber aprobado ya un decreto de medidas urgentes que permitirá recuperar el patrimonio de las personas y el natural "lo antes posible".
Y, tras lamentar que se "partidice" la cuestión de los incendios, ha puntualizado que las investigaciones sobre una "organización coordinada" para prender fuego en Galicia siguen abierta. "En 2006 no se detectó (...), pero ahora se está analizando de nuevo", ha señalado.
En todo caso, lo que Puy Fraga ha evidenciado es que esos incendios fueron no sólo "intencionados", sino dirigidos a "provocar daños muy cerca de casas", lo que generó una situación de "mucho pánico" e incluso "terror".
"Reconozcamos lo que todo el mundo sabe: el monte solo no se pone a arder", ha resuelto, antes de hacer hincapié en lo cerca de casas que se prendieron algunos fuegos y en el hecho de que esta ola de incendios se cobró cuatro vidas.