Urgen a la Xunta a analizar los niveles de contaminantes en aguas y embalses tras los incendios

   La Sociedade de Historia Natural avisa de los riesgos para la salud de elementos tóxicos perjudiciales y esgrime varios estudios

   SANTIAGO DE COMPOSTELA, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -

   La Sociedade Galega de Historia Natural avisa de que los incendios forestales generan en "grandes cantidades" hidrocarburos aromáticos policíclicos (HAP), "muchos" de los cuales "son contaminantes orgánicos tóxicos, persistentes y bioacumulables", que "en mayor o menor medidas tienen, o se sospecha que tienen, efectos carcinogénicos o mutagénicos".

   En un comunicado, explica que estos contaminantes son arrastrados por las lluvias hasta los cursos y masas de aguas, por lo que exige a la Consellería de Sanidade (en colaboración con Augas de Galicia, la Confederación Hidrográfica Miño-Sil y servicios municipales de agua) a que proceda a analizar "urgentemente" los niveles de estos tóxicos en las aguas y embalses de Galicia tras la ola de fuegos de mediados de octubre.

   Así, la Sociedade Galega de Historia Natural se remite a estudios como en el que se detectaron niveles "muy elevados" de estos HAP en los sedimentos recogidos cerca del muro del embalse de As Conchas (río Limia).

   También cita otra investigación en la que se observaron niveles de concentración de este contaminante cinco veces mayor en huevos del pájaro 'píllara das dunas' en playas del Noroeste tras la ola de incendios de 2006, "que tuvo unos efectos mayores de los niveles de HAP que la marea negra del Prestige".

   Además, esta entidad de defensa del medio natural gallego apunta que en los sedimentos erosionados de zonas quemadas en Galicia se detectaron en el pasado "niveles muy elevados de algunos elementos traza, principalmente zinc y maganeso, que podrían comprometer la potabilidad de las aguas".

INCENDIOS EN ZONAS DENSAMENTE POBLADAS

   A este respecto, remarca que los incendios afectaron a buena parte de la Comunidad, "incluyendo zonas densamente habitadas", en donde calcinaron "extensas superficies en las cabeceras o entornos de manantiales, captaciones de auga, ríos y embalses, tanto hidroeléctricos como de abastecimiento de agua a poblaciones".

   Por ello, "existe riesgo de que las cenizas, carbón y sedimentos arrastrados por las lluvias ocasionen la contaminación de cursos y masas de agua".