Un proyecto en el que participa Ence prueba con éxito sensores para prevenir incendios en montes gallegos

La Asociación Forestal Galega llama a instituciones a "interesarse por el proyecto" para su continuidad

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 24 Jul. (EUROPA PRESS) -

El proyecto 'Forestech', impulsado por la Asociación Sectorial Forestal Galega (Asefoga) en colaboración con la empresa de celulosa ENCE, ha obtenido unos "exitosos resultados" en su intento por cuidar los bosques gallegos y prevenir incendios con el uso de la tecnología, mediante la colocación de sensores en montes.

De esta forma lo han comunicado el presidente de Asefoga, Jacobo Feijóo, y su directora técnica, Patricia Sánchez, en una rueda de prensa celebrada este miércoles en la sede principal de Unións Agrarias (UU.AA.), situada en Santiago.

La iniciativa, desarrollada entre los meses de agosto de 2023 y junio de este año, ha estudiado, a través de un sistema de sensores conectados a tecnologías de la información y de la comunicación (TIC), las condiciones en las que se encontraban tres montes del Ayuntamiento de Valga (Pontevedra) con el objetivo de controlar, cuidar y prevenir los riesgos a los que se enfrentan los terrenos forestales.

El presidente de la asociación ha asegurado que el proyecto no solo les ha permitido "comprobar que se trata de un sistema que funciona", sino también obtener un "volumen importante" de datos relativos a las circunstancias y problemáticas que atraviesan los montes gallegos.

¿CÓMO FUNCIONA?

Tal y como ha explicado el representante de Asefoga, antes de instalar el sistema de sensores en el terreno, es necesario elaborar un estudio de la superficie con el objetivo de detectar cuántos dispositivos se precisan en relación con su magnitud y, en función del tipo de suelo y de plantas arbóreas, qué parámetros extraer.

A partir de ese momento, se ejecuta la instalación del sistema de detección y se inicia, en tiempo real, la transmisión de los datos. Información, entre otras, relativa a cuestiones como el riesgo de incendio de la superficie, radiación, plagas o enfermedades.

En la misma línea, Feijóo ha asegurado que el mantenimiento de los sensores de la red es "sencillo" y "asequible" al funcionar a través de pilas. El precio del conjunto depende de la complejidad y del tamaño del terreno, pero su media oscila entre los 700-800 euros.

CON VISTAS AL FUTURO

Los representantes de Asefoga han instado a los particulares y a las instituciones en la comparecencia a "interesarse por el proyecto" y que este pueda continuar desarrollándose en el futuro.

"El proyecto nos abre un campo de trabajo muy interesante respecto al uso de las nuevas tecnologías y la mejora de sistemas que nos permitan monitorear información desde el punto de vista ambiental y de la prevención", ha mencionado el presidente.

Por el momento, la organización está estudiando qué hacer con los datos que han obtenido y busca nuevas vías para mejorar la protección y resiliencia de las áreas forestales gallegas.