CASTRO CALDELAS (OURENSE), 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
La jornada electoral en Castro Caldelas (Ourense), uno de la cuarentena de ayuntamientos en los que ha habido que repetir las elecciones del 28 de mayo, ha transcurrido sin incidencias y con "normalidad", eso sí, entre cafés, bica tradicional, queso y jamón ibérico repartidas por las mesas de los tres colegios.
No ha habido campaña electoral y tampoco la posibilidad de que voten los jóvenes que desde el 28 de mayo adquirieron la mayoría de edad, pero sí se ha vivido de nuevo una jornada de fiesta de la democracia apenas unos meses después de las generales y con la mirada puesta ya en las autonómicas.
Además, hubo que repetir inclusive la composición de las mesas y se mantuvo el censo en 1.123 personas recogidas por el censo para la celebración de mayo, fecha desde la que se murieron también 17 personas.
La jornada arrancó a las 9,00 horas y concluye a las 20,00 horas, como en un día electoral habitual. El caso de Castro Caldelas se debe a que se perdió la custodia de 118 votos y la alcaldesa, la socialista Sara Inés Vega, ganó la mayoría absoluta con una diferencia de algo más de 50, por lo que se sembraron dudas sobre el resultado.
En declaraciones a Europa Press este domingo, la regidora ha expresado que la jornada se está desarrollando con "absoluta normalidad" y ha deseado que sea un domingo de "democracia" y que a la gente que le "robaron y secuestraon el voto" se le devuelva la ocasión de ejerder su derecho.
Por su parte, César Enrique Cachín, del PP, también destacó, tras "cumplir su obligación de votar", que la jornada se desarrolló de forma "muy tranquila" y esperó que terminase de la misma manera. En el jornada de mañana también fue a votar el candidato del BNG, José Luis Prieto, que no obtuvo representación en mayo y que dijo que la jornada iba "muy bien".