Dice que será su clienta la que decida si acuden al Tribunal Europeo de Derechos Humanos
A CORUÑA, 22 Jun. (EUROPA PRESS) -
El abogado de Rosario Porto, José Luis Gutiérrez Arangüren, ha mostrado su "estupefacción" por la decisión del Tribunal Constitucional de no admitir a trámite su recurso por la condena por asesinato de su clienta en relación con la muerte de su hija, Asunta Basterra.
En declaraciones a Europa Press, ha tildado de "vergüenza" una decisión que el Tribunal Constitucional basa en que considera que no es posible admitir a trámite el recurso por no apreciar "especial transcendencia constitucional" que exige la Ley Orgánica del citado tribunal.
Preguntado si le ha trasladado ya esta decisión a su clienta, ha dicho que todavía no ha hablado con Rosario Porto pero ha precisado que será ella "la que decida" si acuden o no ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
Con su decisión, el Constitucional pone freno a las pretensiones de la defensa de Porto y cierra la puerta a pronunciarse sobre la condena, ratificando de facto los 18 años de prisión que cumple la madre de Asunta.
OTROS RECURSOS
Antes que el Constitucional, tanto el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) como el Tribunal Supremo confirmaron la condena impuesta contra ella y su exmarido por la Audiencia Provincial de A Coruña, rechazando en todas las ocasiones. Con el TC, Porto ya no cuenta con más opciones de recurso en el sistema judicial español.
En concreto, la Sala II de lo Penal del Tribunal Supremo desestimó en octubre los recursos presentados tanto por Rosario Porto como por Alfonso Basterra, ha ratificó la sentencia que los condenó a 18 años de prisión por el asesinato de su hija.
A su vez, estos recursos fueron presentados por las defensas de Porto y de Basterra después de que en marzo el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) ratificase también la condena la Audiencia Provincial de A Coruña por el asesinato de su hija Asunta.
MUERTE DE ASUNTA
Asunta Basterra Porto, de 13 años, murió asfixiada el 21 de septiembre de 2013, aunque su cuerpo, abandonado en una pista forestal en las proximidades de Santiago de Compostela, no fue localizado hasta la madrugada del día 22.
La investigación posterior, que terminó con el encarcelamiento de sus padres adoptivos, determinó que, además, la menor había consumido antes de su muerte y en los meses previos distintas cantidades de 'lorazepam', la última en rango "tóxico".
Alfonso Basterra y Rosario Porto fueron juzgados cuando se cumplían dos años del asesinato de la menor, en septiembre de 2015, declarados culpables de asesinato por unanimidad del jurado popular y condenados por asesinato por la Audiencia Provincial.