Critican que los "desalojasen" del aula 8 de Historia y creen que la "voluntad de colaboración" de la universidad "es mera retórica"
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 24 May. (EUROPA PRESS) -
Los estudiantes acampados en la Facultad de Geografía e Historia de Santiago de Compostela en protesta por la guerra en Gaza han realizado este viernes una intervención pública para criticar que el decanato los haya "desalojado" de una de las aulas que estaban utilizando y que esté difundiendo que no habrá espacios para realizar los controles de la próxima semana, considerando que la USC busca "dejarlos como enemigos ante el estudiantado" cuando la Asamblea tiene "el compromiso unánime de no dificultar ni boicotear los exámenes".
La ocupación de espacios en esta facultad, que se inició hace 10 días, obligó a reubicar en otros centros de la Universidad, como Filosofía y Medicina, la celebración de los exámenes y otras actividades. El movimiento recibió el apoyo del decano, que le cedió espacios siempre y cuando la protesta fuese "compatible con la marcha relativamente ordinaria" de la facultad.
Las tiendas y los objetos personales de los jóvenes ocupan espacios tanto de la primera como de la segunda planta y, desde el lunes 20 se han extendido a más aulas (la 5 y la 8).
En esta situación, el decano de la facultad envió estos días un correo electrónico, al que ha tenido acceso Europa Press, en el que reconocía que no tiene "garantía de ubicar todos los exámenes de la semana próxima" en otros espacios universitarios, lo cual podría afectar al calendario, según fuentes consultadas.
NUEVOS ESPACIOS
Los miembros de la acampada han confirmado este viernes que habían sido "desalojados" del aula 8, cuya "ocupación había sido comunicada por la asamblea la noche anterior" para "paliar las necesidades de cara a crear nuevos espacios para garantizar la integridad física y mental" de los participantes.
"No ocupamos estas aulas por capricho, si no por la necesidad de un 'punto lila' y de una zona de baja estimulación", ha dicho Paula, una de las portavoces de los estudiantes.
La negativa a usar estas aulas, han añadido, se produce a pesar de que "todos los exámenes previstos en esta facultad fueron realizados sin trabas por parte de la asamblea, siendo el mayor percance un retraso de dos minutos".
Los jóvenes aseguran que tienen el compromiso "de no dificultar ni boicotear los controles" y acusan a la USC de "intentar dejarlos como enemigos ante el estudiantado", incluso "comparando frívolamente la ocupación de espacios que necesitamos de la facultad con la ocupación sionista en Gaza".
Los estudiantes acampados afirman que la universidad tiene "capacidad y medios para garantizar el buen funcionamiento de los exámenes", alegando que "solo en la zona vieja cuentan con más de 50 aulas". "Demuestran, una vez más, como su voluntad de colaboración es mera retórica", han dicho.
"La hostilidad no es ni será hacia el estudiantado, si no hacia aquellos que, ya sea de manera velada o directa, siguen siendo cómplices del genocidio", han explicitado.
SIN "MEDIAS TINTAS"
A continuación, las portavoces han leído un manifiesto de la Asamblea en el que reclaman que todas las instituciones españolas se impliquen con "las demandas históricas del pueblo palestino".
Dentro de las instituciones que han señalado está la USC, que "colabora en trece proyectos de investigación y en siete publicaciones científicas conjuntas con universidades israelíes" y que "le concedió un premio a la filósofa sionista Marta Nussbaum".
Frente a esto, han reclamado un "boicot" también "académico y cultural a Israel" y "el reconocimiento de que lo que está haciendo en Palestina es un genocidio", además de exigir el "alto el fuego inmediato y permanente" y el "fin del bloqueo ilegal de la Franja de Gaza.
"Exigimos a la USC que ponga fin a todas las relaciones con cualquier institución que promueva la cultura de la guerra y que sea transparente facilitándonos toda la información sobre proyectos de investigación en curso con instituciones académicas israelíes", apunta el manifiesto, en el que los estudiantes afirman que "no aceptan ni aceptarán medias tintas ni palabrería barata".
Los estudiantes han sostenido que "de nada sirve reconocer el Estado de Palestina si se sigue legitimando el marco colonial impuesto por Israel a la par que se colabora directa o indirectamente con el sustento del genocidio". "El Gobierno pide, la universidad pide, nosotros exigimos: desde el río hasta el mar, Palestina vencerá", han concluido.