El proyecto contempla una plaza de 20 metros hacia la calle República Argentina
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 24 May. (EUROPA PRESS) -
El gobierno de Santiago, compuesto en solitario por el Partido Socialista, ha alcanzado un principio de acuerdo con el grupo de Compostela Aberta para desbloquear la modificación del plan general de la ciudad y viabilizar la reforma de la parcela que ocupan las antiguas instalaciones del colegio Peleteiro, en desuso desde hace más de una década.
Después de semanas de negociaciones entre el equipo de gobierno y las fuerzas con representación en el consistorio de la capital gallega, PSOE y CA han firmado este martes un preacuerdo para sacar adelante la modificación del PGOM de cara a dar encaje a la bautizada como operación Peleteiro.
El pacto contempla el compromiso de que la plaza pública de 1.600 metros cuadrados proyectada en el solar del antiguo colegio cuente con una apertura de 20 metros hacia la calle República Argentina, además de otras salidas hacia San Pedro de Mezonzo y Xeneral Pardiñas.
Según el regidor, Xosé Sánchez Bugallo, la previsión es que la modificación del plan general se lleve a un pleno extraordinario a mediados del mes de junio, cuando "ya estarán los planos corregidos y actualizados" junto a los informes técnicos y el convenio urbanístico necesario con la empresa propietaria de la parcela.
"Espero que con el apoyo de Compostela Aberta y del BNG salga adelante", ha señalado el alcalde, quien ha censurado la actitud "incoherente e ilógica" del Partido Popular durante las negociaciones, tras las cuales "queda fuera de juego".
COMPOSTELA ABERTA
Por su parte, Compostela Aberta ha manifestado que su postura entronca con el "compromiso" mantenido "desde el primer día" para "no bloquear el proyecto por intereses partidistas". "Ya sabemos lo que es perder cuatro años por cuestiones electorales que poco le preocupan a los vecinos", ha señalado la portavoz del grupo, Marta Lois.
En este sentido, ha incidido en que la solución acordado era en 2018 la opción "preferente" para BNG y PP, al tiempo que ha apelado a que el alcalde "tome nota y asuma que gobernar desde la soberbia, como viene haciendo en estos tres años, provoca conflictos y decisiones que pueden ser poco adecuadas para el conjunto de la ciudadanía".