Alexandre Bóveda, entre los 21 represaliados franquistas homenajeados por el Gobierno central en un acto en Madrid

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, preside el acto con motivo de la celebración del ‘Día de Recuerdo y Homenaje a todas las víctimas del golpe militar, la Guerra y la Dictadura’, en el Auditorio Nacional de Música, a 10 de diciembre de 2024, en Ma
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, preside el acto con motivo de la celebración del ‘Día de Recuerdo y Homenaje a todas las víctimas del golpe militar, la Guerra y la Dictadura’, en el Auditorio Nacional de Música, a 10 de diciembre de 2024, en Ma - Carlos Luján - Europa Press
Actualizado: martes, 10 diciembre 2024 16:47

   Sánchez anuncia un centenar de eventos en 2025 por los 50 años de la muerte del dictador bajo el lema 'España en libertad'

   MADRID / SANTIAGO DE COMPOSTELA, 10 Dic. (EUROPA PRESS) -

   El histórico politico galleguista Alexandre Bóveda, el militar Xosé Fortes y el magistrado Francisco Javier Elola y Díaz Varela han sido los tres gallegos de los 21 represaliados de la dictadura franquista que el Gobierno central ha homenajeado en un acto este martes en Madrid.

   En este acto, el jefe del Ejecutivo estatal, Pedro Sánchez, ha anunciado que en 2025 se celebrarán un centenar de actos bajo el lema 'España en libertad' en el 50 aniversario de la muerte del dictador Francisco Franco.

   Sánchez ha señalado también que se creará una Alto Comisionado y un comité científico de expertos para articular estos actos y colaborar con todas las administraciones en su celebración.

   El presidente ha explicado que estas actividades tienen como objetivo poner en valor la gran transformación que ha experimentado España en medio siglo de democracia y rendir homenaje a todas las persoans y "colectivos" que lo hicieron posible. Para ese fin se llevarán a cabo más de un centenar de "actividades culturales, eventos de diversa índole, en escuelas, calles, y museos" a partir del 8 de enero.

   Además, el jefe del Ejecutivo ha celebrado los efectos que está teniendo la Ley de Memoria Democrática desde su aprobación hace dos años como, por ejemplo, que se avanza "con paso firme" en la disolución de la Fundación Francisco Franco. "En una democracia como la nuestra no hay tirano cuya obra merezca ser ensalzada", ha apuntado.

   En la misma línea ha dicho que gracias a la ley se han exhumado más de 5.600 cuerpos y se han logrado tramitar 637 declaraciones de reconocimiento y reparación personal. También se han "resignificado" 15 lugares de memoria, "como el Valle de Cuelgamuros".

   Además ha subrayado que, gracias a esta norma, "más de 300.000 descendientes de exiliados" van a poder obtener la nacionalidad española, "un acto de justicia con quienes fueron privados" de este derecho "por culpa de la persecución política".

ADVIERTE DE UN RIESGO REAL "DE INVOLUCIÓN"

   Sánchez ha celebrado que tras la dictadura triunfasen la libertad y la democracia pero ha advertido de que la victoria "nunca es definitiva" pues a su juicio existe un riesgo de volver al pasado. "La involución es real, existe, está ahí", ha remarcado.

   Así, ha lamentado que "discursos de reivindicación de la dictadura profanan hasta el templo de la democracia, que es el Congreso de los Diputados", en referencia a las palabras del diputado de Vox Manuel Mariscal, que elogió la dictadura como "un periodo de reconstrucción, progreso y reconciliación para lograr la unidad nacional".

   Sánchez también ha aprovechado para cargar contra las "falsas" leyes "de concordia" aprobadas en varios gobiernos autonómicos por PP y Vox y ha señalado que "no hay concordia cuando se equipara víctimas con verdugos" ni cuando "se perpetúan mentiras históricas".

MIGUEL HERNÁNDEZ Y MARÍA ZAMBRANO

   De este modo, el Gobierno ha rendido homenaje a una veintena de personas: El poeta Miguel Hernández, condenado a pena de muerte tras la Guerra Civil, conmutada por treinta años, que murió de tuberculosis en la prisión el 28 de marzo de 1942.

   También a la intelectual y filósofa María Zambrano, que tras la guerra se exilió en París, Nueva York y La Habana, hasta que se instaló en México, donde impartió clases de Filosofía en la Universidad. Regresó a España en 1984 y fue Premio Príncipe de Asturias en 1981 y Premio Miguel de Cervantes de Literatura en 1988.

   Blas de Infante, "padre de la patria andaluza", notario y político andalucista. Fue detenido por un grupo de falangistas, encarcelado en Sevilla, y fusilado la madrugada del 11 de agosto en el kilómetro 4 de la carretera de Sevilla a Carmona.

   María Egea embarcó junto a su familia en el puerto de Alicante en el buque Stanbrook con destino a Orán (Argelia), donde estuvo 50 años exiliada.

   Alexandre Bóveda, político republicano y galleguista. Encarcelado por los sublevados en julio de 1936, fue sometido a un consejo de guerra sumarísimo y condenado a muerte. Ejecutado el 17 de agosto.

   Pino Sosa cuyo padre fue detenido y enviado a un campo de concentración tras el golpe de Estado del 18 de julio de 1936.

   Julián Zugazagoitia, periodista, político, ministro, diputado y director del periódico "El Socialista". Al final de la guerra de España tuvo que exiliarse a Francia, donde fue arrestado por la Gestapo y entregado a las autoridades españolas. Juzgado por un Consejo de guerra sumarísimo fue condenado a muerte y fusilado en las tapias del cementerio del Este de Madrid el 9 de noviembre de 1940.

   Carmen Hombre Ponzoa y Juan Máximo Salazar. Con la llegada de la dictadura, ambos fueron encarcelados y represaliados. Carmen fue ejecutada estando embarazada de 8 meses. Juan Máximo fue torturado antes de ser fusilado en Jerez.

   Enrique Ruano Casanova estudiante de Derecho e integrante del Frente de Liberación Popular. Fue torturado y arrojado por una ventana. Su muerte simbolizó la resistencia estudiantil.

   Ángeles Flórez Peón, "Maricuela", afiliada a las Juventudes socialistas en 1936, fue una histórica miliciana republicana en el frente de Oviedo. Al caer Asturias fue detenida, condenada a 9 años y encarcelada en la prisión de Saturrarán.

   Francisco Javier Elola y Díaz Varela, magistrado del Tribunal Supremo y diputado por Lugo en las elecciones a las Cortes Constituyentes durante la II República. Condenado a muerte por un Consejo de Guerra, fue ejecutado el 12 de mayo de 1939 en Barcelona.

   Basilio Blasco Lahoz, al estallar la guerra de España se vio forzado a huir de su pueblo junto a su familia debido a su militancia republicana de izquierdas. En 1939 pasó la frontera hacia Francia, donde fue internado en varios campos de concentración. Fue deportado al campo de exterminio nazi de Mauthausen. Trasladado a Gusen, murió en este campo el 19 de julio de 1941 a los 39 años.

VICENTE ALEIXANDRE Y MIGUEL DE MOLINA

   Vicente Aleixandre poeta perteneciente a la Generación del 27. Tras la guerra permanece en España y ayudó económicamente a la viuda de Miguel Hernández. En 1949 es nombrado Académico de la Lengua y se convierte en maestro y protector de los jóvenes poetas españoles y en 1977 recibe el Premio Nobel de Literatura.

  Joaquín Amigo, escritor, profesor y filósofo, amigo y confidente de Federico García Lorca y discípulo de Ortega y Gasset. Murió asesinado por milicianos republicanos al ser lanzado por el Tajo de Ronda a finales de agosto del año 1936, apenas unos días después de la muerte de Lorca en Granada.

   Conchita Viera, cuyo padre fue asesinado por falangistas el 25 de septiembre de 1936. Junto a su padre, 48 personas más fueron arrojadas en 1936 a la mina Terría y sus restos han sido exhumados 81 años después.

   Xosé Fortes, militar de carrera y miembro fundador de la Unión Militar Democrática. Fue condenado a cuatro años de prisión y expulsión de las Fuerzas Armadas, aunque fue amnistiado diez años después.

   Consuelo Berges, traductora, periodista, escritora y biógrafa, defendió el voto femenino, buscó la igualdad de derechos masónicos para hombres y mujeres.

  Luis Pérez Lara, condenado a 13 años de los que cumplió siete en distintas cárceles españolas, fue impulsor de la primera asociación de expresos políticos en España.

   Miguel de Molina, cantaor y bailarín. Fue secuestrado en su camerino y apaleado en el franquismo. Se exilió en Argentina en 1942 donde continuó su carrera hasta su muerte en 1993, a los 84 años.

   Justa Freire, maestra y pedagoga, fue desposeída de su título de maestra y expulsada de su escuela y al acabar la guerra fue condenada a seis años de prisión.

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