AMPL.- Touriño subraya que la Autovía do Barbanza tiene la "mayor seguridad posible" y pide disfrutarla con "prudencia"

Caride garantiza "a vecinos y alcaldes" que "se abordarán las obras complementarias" que restan en la AG-11

RIANXO (A CORUÑA), 15 (EUROPA PRESS)

El titular de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, destacó que la Autovía do Barbanza Padrón-Ribeira (AG-11), que se abrirá hoy al tráfico a las 20.00 horas, tiene "una rúbrica", que es "el más alto estándar de seguridad posible", una vez convertida la antigua vía rápida en una doble vía y con un 40 por ciento del trazado nuevo.

En la inauguración de esta infraestructura, en las Curvas de Vilas, en Rianxo, uno de los antiguos puntos negros de una vía rápida que se caracterizó por su alta siniestralidad, Touriño agradeció "la paciencia" de los vecinos durante los 26 meses de obras, "un tiempo récord", subrayó, si se tiene en cuenta que hubo que compatibilizar las actuaciones con el tráfico rodado.

Touriño contrapuso "la inseguridad y falta de ambición" en el pasado con la "planificación y seguridad" de esta autovía, "un cambio sustancial" que quiso personalizar en la conselleira de Política Territorial, María José Caride, y su departamento, que cambiaron el anteproyecto previsto por el anterior Gobierno del PP.

El presidente gallego y la conselleira coincidieron en que la apertura de esta vía de alta capacidad supone "un antes y un después" y Touriño añadió que beneficiará tanto a la comarca do Barbanza como a toda Galicia, además de suponer "un elemento clave en el reequilibrio territorial".

GANANDO LA ACCESIBILIDAD

"Galicia está ganando la batalla de la accesibilidad, articulándose en red, paso a paso, el conjunto del país", resaltó y apuntó que no sólo se avanza en esta malla, sino "sobre todo se mejora y se crea cultura" de seguridad. En este sentido, recordó que recientemente la Xunta nombró a una comisionada por la seguridad vial, Natividad González Laso, que también acudió al acto, al igual que Jeanne Picard, vicepresidenta de la asociación 'Stop Accidentes'.

Por su parte, María José Caride agradeció que tanto la concesionaria, Sacyr, como los servicios técnicos de su departamento priorizasen la seguridad de la autovía y, ante las críticas de alcaldes de la comarca por inaugurar la infraestructura sin completar problemas que causaron las obras, garantizó que, tras abrir la AG-11, "se abordarán las obras complementarias".

"Este trabajo no terminó, hay cuestiones presentes, y los vecinos y los alcaldes saben que las vamos a abordar, obras complementarias, algunas muy necesarias, y también aprovecharemos para actuar sobre otras", señaló.

Caride también resaltó que la autovía "incorpora 20 kilómetros" de medidas de protección para los motoristas y recordó que en el anteproyecto primero no se preveía "ni un metro", por lo que coincidió con Touriño en que la AG-11 presenta "la mayor seguridad", con un paso transversal cada medio kilómetro.

AUSENCIAS DE ALCALDES DEL PP Y BNG

Pedro Piñeiro, alcalde de Rianxo, recriminó la actitud de los regidores 'populares' de Ribeira y de A Pobra do Caramiñal, José Luis Torres Colomer e Isaac Maceiras, y del de Boiro, el nacionalista Xosé Deira, por no asistir a este acto en protesta por la falta de obras complementarias que restan por ejecutar.

Así, el regidor socialista de Rianxo contrapuso esta actitud con la que tuvo él mismo en 1994 cuando se inauguró un tramo de la vieja vía rápida do Barbanza. "Creí que institucionalmente tenía que estar aquí", recordó. También celebró la mejora de seguridad que aportará al autovía, pues defiende que esto es lo deseable, "cueste lo que cueste".

Esta actuación, de 40 kilómetros de longitud --uno menos que la vía rápida que sustituye-- entre Padrón y Ribeira requirió un inversión de 127 millones de euros, y cuenta con 12 enlaces, 28 pasos superiores, 49 inferiores y 11 viaductos.

Es la más larga de la red autonómica y precisó realizar un 40 por ciento de su trazado distinto al de la vieja vía rápida con el fin de eliminar buena parte de las curvas que presentaba y suavizar el resto. La autovía estará controlada las 24 horas, en este momento desde Padrón y en el futuro desde Boiro, donde se está construyendo un centro para ello.