Un año de prisión para el hombre que propinó una patada al alcalde de Ourense

   OURENSE, 11 Oct. (EUROPA PRESS) -

   El hombre acusado de propinar una patada en el estómago del alcalde de Ourense, Jesús Vázquez, durante la campaña de las elecciones generales el pasado 24 de junio, ha aceptado un año de prisión y una multa de seis meses a razón de tres euros al día por un delito de atentado contra la autoridad.

   El juicio previsto para este miércoles en la Audiencia Provincial de Ourense no se ha celebrado al llegar ambas partes a un acuerdo de conformidad, que rebaja a la mitad la petición inicial de la Fiscalía de dos años y multa de siete euros al día durante cuatro meses por atentado.

   Además, el hombre se enfrentaba a sendas multas de siete euros al día durante tres meses por dos delitos de malos tratos al regidor y a la mujer que le acompañaba en el momento de la agresión.

   Finalmente, la Fiscalía ha retirado la petición por malos tratos debido a que tanto el regidor como la mujer que también fue agredida por el acusado renunciaron a que se le juzgara por este delito.

   De hecho ninguno de los dos se presentó este miércoles en la Audiencia. El alcalde envió un escrito la Fiscalía en el que insistía en su intención de renunciar a la acusación de su agresor (no llegó a presentar acusación), que es un joven conocido en la ciudad por su adicción a las sustancias estupefacientes.

   El acusado llegó escoltado por la Policía procedente de prisión, donde cumple condena por otro delito distinto. Tanto él como su defensa se mostraron conformes con la pena solicitada.

   Los hechos tuvieron lugar a las 18,30 horas del 24 de junio del pasado año, en plena campaña electoral gallega. Según se recoge en el escrito de la Fiscalía, el acusado, J.M.D. abordó al regidor y a su secretaria en la Plaza Mayor llamándole "hijo de puta, traidor y malnacido" y le propinó una patada en el estómago al tiempo que le decía "ojalá te mueras".

   También agredió a la secretaria del alcalde, que había acudido a socorrerle, propinándole un golpe en la cadera con una valla que estaba en la plaza con motivo de las fiestas de la ciudad.

   Desde un primer momento, y a pesar de las recomendaciones de varias personas que se encontraban en la zona, el alcalde descartó presentar una denuncia ante la Policía. De hecho siguió con su agenda de actividades que remató con una intervención en el mitin del presidente del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo, en la ciudad con motivo de las elecciones generales.