Otero reclama la "colaboración de todas las instituciones" y recuerda que su "falta" perjudica a los ciudadanos
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 25 Abr. (EUROPA PRESS) -
El BNG y el PSdeG han coincidido este martes al pedir "valentía" y "contundencia", respectivamente, a la valedora do Pobo, Milagros Otero, en sus demandas contra las instituciones que no cumplen con los derechos de los ciudadanos. Por su parte, En Marea ha vuelto a exigir su cese al considerar que su informe sobre las actuaciones realizadas en 2016 es una "laudatio generalizada" de la actuación de la Xunta.
La valedora ha llevado este martes su informe para 2016 al pleno de la Cámara gallega, después de su presentación en la Comisión de Peticiones. El documento, según ha recordado, recoge un "incremento" de las quejas, hasta las 64.937, que demuestran que la institución es cada vez "más conocida por el pueblo". De ellas, las más numerosas son las relativas a la sanidad, como la firmada por médicos y trabajadores del Meixoeiro que "temían que quedase sin funciones con la puesta en marcha del Hospital Álvaro Cunqueiro".
En su discurso, además, Milagros Otero ha aprovechado para pedir la "colaboración de todas las instituciones" ya que, en su opinión, la falta de esta práctica "redunda en perjuicio" de la ciudadanía. "El Valedor no es el enemigo, todas las instituciones reciben recomendaciones que a veces no comparten", ha manifestado para asegurar que ella no responderá a las críticas "con ataques".
"Comprometo mi esfuerzo personal y el de todo el equipo del Valedor en defensa de los derechos de los gallegos, somos conscientes de la responsabilidad que implica nuestro trabajo y la asumimos con humildad y entrega", ha subrayado.
Tras la intervención de la valedora, ha tomado la palabra el diputado del BNG Xosé Luís Rivas 'Mini', quien ha asegurado que el informe de la defensoría gallega "reafirma" las críticas del Bloque a la "acción" del Gobierno del PP. "Diagnostica de forma descarnada el desmantelamiento de los servicios públicos", ha manifestado.
En este sentido, ha asegurado que las numerosas quejas en materia de sanidad, "más de 50.000" no responden "a fallos puntuales", sino a "fallos del sistema motivados de una acción de gobierno que penaliza la sanidad pública". Ante ello, ha recordado que una defensoría del pueblo tiene como función "denunciar las prácticas" de las instituciones.
"Saludamos la resolución de los casos en los que ayudó pero, aún así, falta valentía cuando se detectaron casos de abuso de la autoridad por parte de la administración. Es ahí en donde su institución debería afirmarse efectiva y, a nuestro juicio, no lo hizo", ha señalado.
"CONTUNDENCIA"
En esta línea, el socialista Raúl Fernández ha compartido la preocupación de la valedora al respecto de la "insatisfacción de los ciudadanos respecto al tratamiento de sus derechos" desde las instituciones. "Con ese objetivo le pedimos generosidad y flexibilidad en la aceptación de las quejas; decisión y perseverancia en la tramitación y firmeza y contundencia en la demanda a las instituciones para reclamar el cumplimiento de los derechos de los ciudadanos", ha señalado.
Además, también ha aprovechado su turno de palabra para criticar el "porcentaje mínimo" de quejas o reclamaciones que provienen del rural, según el informe presentado. "Esta desconexión entre el rural y el Valedor do Pobo produce desigualdad", ha indicado.
CESE
Tras la intervención de Fernández ha tomado la palabra el portavoz parlamentario de En Marea, Luís Villares, quien ha cargado duramente contra la actuación de la valedora do Pobo, cuyo cese ha vuelto a pedir. "En Marea defiende la institución de la defensoría del pueblo que debe hacer un control democrático del ejecutivo y del Parlamento, por eso pedimos la renuncia de la valedora", ha asegurado.
Al respecto, ha denunciado que su informe correspondiente al ejercicio 2016 es "una laudatio generalizada" de las actuaciones de la Administración autonómica, a pesar de que las quejas relativas a la actuación de la Xunta suponen el "98% del total".
Y es que, en la presentación del informe, Milagros Otero, incidió de forma especial en la situación de las personas sin techo en la ciudad de Santiago de Compostela, gobernada por Compostela Aberta, a pesar de que el número de quejas relativas a esta cuestión es inferior al de otros departamentos e instituciones.
Precisamente, a esta polémica se ha referido este martes la valedora, Milagros Otero, al incidir en su discurso que, "el Ayuntamiento de Santiago parece haber adoptado, finalmente, las medidas recomendadas" por la institución que dirige.
APOYO DEL PPDEG
Por su parte, la parlamentaria popular Paula Prado ha puesto en valor el trabajo realizado por la defensoría gallega para "solucionar las carencias del sistema" y "avanzar en la defensa de los derechos de la ciudadanía". "Las quejas hacen reaccionar a las administraciones", ha señalado.
Tras ello, ha criticado que En Marea pida la dimisión de la valedora por el hecho de que reclame al Consistorio compostelano el cumplimiento de unas recomendaciones. "La administración que más quejas suma es la Xunta. ¿Tendríamos que haber pedido la dimisión de la valedora? No, aunque no nos guste lo que nos diga, no hay que sacar de en medio lo que molesta, eso se lo dejamos a otros", ha manifestado en relación a las palabras pronunciadas por Villares.
Además, ha aprovechado para censurar que el Ayuntamiento de Santiago "lidere el ránking de omisión" de las peticiones del alto comisionado gallego. "Fue requerido 19 veces por no atender las peticiones", ha señalado para recordar que sólo le sigue de cerca el Consistorio de Vigo, con "18 peticiones".
Por ello, ha replicado a Villares que no le corresponde al Valedor do Pobo "hacer crítica política". "Ésa es nuestra labor, no la de las instituciones de control, que queremos que sigan siendo independientes como lo son", ha apuntado.