Cortabitarte responde a juez, fiscal y su abogado en su 1ª declaración en la causa que le atribuye 80 homicidios
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 27 Jul. (EUROPA PRESS) -
El cargo de Adif investigado por el accidente del tren Alvia ocurrido hace cuatro años en Angrois, donde murieron 80 personas y 144 resultaron heridas, ha asegurado que desconocía el cambio de proyecto en la línea Ourense-Santiago, que supuso eliminar el sistema de control continuo de la velocidad (el 'ERTMS') de los últimos kilómetros del trayecto, incluida la curva en la que se produjo el siniestro.
Además, según fuentes consultadas por Europa Press, ha tratado de desviar responsabilidades señalando a Renfe --en concreto al responsable de seguridad de la operadora ferroviaria-- y a Ineco -la empresa de consultoría de la que Renfe y Adif se reparten más de la mitad del accionariado--.
En esta ocasión, en su comparecencia este jueves ante el instructor de la causa, Andrés Cortabitarte, director de seguridad en la circulación de Adif de 2006 a 2013, sí ha optado por hablar, aunque ha adelantado ya desde el principio que lo haría solo en respuesta a las preguntas del juez, Andrés Lago; el nuevo fiscal, Mario Piñeiro, y su abogado.
De hecho, Cortabitarte, que estaba citado para las 13,00 horas, ha llegado a los juzgados compostelanos sobre las 10,15 horas, y su declaración no ha empezado hasta las 15,30 horas, debido al retraso acumulado en las intervenciones previas de los peritos Juan Carlos Carballeira (de 9,30 a 12,15 horas) y César Mariñas (de 12,15 a 15,30 horas).
HASTA MARZO DE 2011
El primero en interrogar al cargo de Adif ha sido el propio magistrado, que le atribuye 80 supuestos delitos de homicidio y 144 de lesiones por imprudencia profesional grave, con el respaldo de la Audiencia Provincial de A Coruña, que rechazó el recurso de Cortabitarte y del administrador de infraestructuras ferroviarias.
Al respecto del cambio de proyecto, inscrito en un contexto de años de debate sobre la fecha de llegada del AVE a la comunidad gallega, el cargo investigado ha asegurado desconocerlo, y ha indicado, según las fuentes consultadas, que se enteró "a posteriori", puesto que en aquel momento nadie le dijo nada.
En este sentido, ha aseverado que, aunque el proyecto comenzó a configurarse en 2001, él, al frente del departamento de seguridad, no entró en juego en su validación, según su versión, hasta marzo de 2011.
Originalmente, el proyecto contemplaba el 'ERTMS' para toda la vía, pero finalmente no fue así, y la línea que se inauguró siendo él el máximo responsable de la seguridad en las vías, en ese año 2011, no disponía de este método en los kilómetros anteriores a la estación santiaguesa, incluida la curva de A Grandeira, que hacía necesario reducir la velocidad de unos 200 a unos 80 kilómetros por hora.
El pasado 4 de abril, Andrés Cortabitarte se acogió a su derecho a no declarar, toda vez que la Audiencia todavía no había resuelto sobre su recurso.
Previamente ya estuvo imputado otras dos ocasiones por el primer instructor del caso, pero los magistrados dieron marcha atrás a esta decisión, y apuntaron al análisis de riesgo como principal vía por la que seguir la investigación.
Ahora, de hecho, Cortabitarte está investigado por su relación con los hechos debido a que hay "indicios de una actuación deficiente, por incompleta y parcial, en la evaluación de riesgos".
EL FISCAL, "MUY BIEN"
Pasada en torno a una hora, ha tomado la palabra el fiscal jefe del área de Santiago, Mario Piñeiro, que coordina a un grupo de fiscales que se encargan de la causa desde que abandonó la ciudad el anterior representante del Ministerio Público, Antonio Roma, el pasado mayo.
Piñeiro, que para varios de los abogados presentes en la sala ha estado "muy bien" en la que es su primera participación en un trámite presencial en la causa desde que dio el relevo a Roma, ha trasladado cuestiones a Cortabitarte sobre el análisis de riesgo de la línea y el funcionamiento del 'ERTMS', entre otros aspectos.
"LA NORMATIVA NO LO EXIGÍA"
Ya en torno a las 17,00 horas ha tocado el turno de las preguntas a su letrado, que ha sido más breve de lo que esperaban las partes.
Cortabitarte ha tratado de ilustrar sus respuestas con ejemplos de otros casos, y ha asegurado que la normativa no exigía la realización de un análisis de riesgo, y tampoco uno concreto para evaluar el posible fallo humano (como pasó con el despiste del maquinista).
Además, en concreto sobre la peligrosidad de la curva, ha argumentado que el trayecto se concibe habitualmente como una línea recta.
Por otra parte, Cortabitarte, con una actitud "soberbia" y de "prepotencia" según la califican algunas de las fuentes consultadas, ha alegado que él en el momento del siniestro ya no era director de seguridad en la circulación --dejó de serlo poco antes del 24 de julio de 2013--, de modo que ha señalado a su sucesor en el cargo.