SANTIAGO DE COMPOSTELA, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
Alrededor de un centenar de personas han cubierto en la mañana de este domingo la distancia que separa el Monte do Gozo de la compostelana Praza do Obradoiro para reclamar igualdad entre hombres y mujeres y la eliminación de la violencia de género.
En la V Andaina contra a Violencia de Xénero 'Camiño ao respecto', organizada por la Xunta, han participado la presidenta del Congreso, Ana Pastor, su homólogo en Galicia, Miguel Santalices; y diferentes responsables del Gobierno gallego, como el número dos del Ejecutivo autonómico, Alfonso Rueda, o la secretaria xeral de Igualdade, Susana López Abella.
La caminata ha partido a las 11,00 horas del Monte do Gozo para cubrir el último tramo del Camino Francés. Allí, Ana Pastor ha atendido a los medios para incidir en que "mientras haya una sola mujer" en España que sufra la violencia de género "toda la sociedad" tiene que "arropar" a estas víctimas.
"Sobre todo para que nadie vuelva a vulnerar un derecho sagrado: que las mujeres tienen los mismos derechos que los hombres. Nadie podrá vulnerar lo que quiere toda la sociedad, el respeto a la mujer", ha declarado la presidenta del Congreso.
Por su parte, Alfonso Rueda ha indicado que la lucha contra la violencia de género debería estar "fuera" de la "pelea política". A renglón seguido, ha manifestado que una jornada "de convivencia y alegría" como la de este domingo "es una manera perfecta de demostrar" que es posible una sociedad "más justa".
Ya en el Obradoiro, miembros de la asociación juvenil de voluntarios AIESEC han leído en un manifiesto en el que han reclamado la eliminación de la "desigualdad" entre mujeres y hombres, una realidad "todavía muy presente en la contidianidad".
Así, tras fijar "el respeto" como "base de la convivencia en igualdad", los jóvenes han puesto el foco en la educación como "herramienta clave" para "reducir las brechas" que todavía persisten entre sexos.
"Respeto, tolerancia, implicación y responsabilidad" son los cuatro ejes sobre los que debe girar la lucha para la eliminación de los machismos y la violencia contra las mujeres, un campo en el que "la lucha feminista empieza a dar frutos" pese a que "queda mucho por hacer", han apuntado.
Asimismo, AIESEC ha indicado que la ciudadanía debe "poner voz" a aquellas que "no la pueden alzar", por lo que llaman a "movilizar la conciencia colectiva" para "impulsar el cambio" en la sociedad.
DECLARACIÓN DE LA XUNTA
A continuación, la secretaria xeral de Igualdade, Susana López Abella, ha procedido a la lectura de la declaración institucional de la Xunta con motivo del 25 de noviembre, Día Internacional para la eliminación de la Violencia de Género.
En ella, el Gobierno gallego define la violencia de género como "la manifestación más cruel e inhumana de la secular desigualdad" entre hombres y mujeres; una problemática que se produce "con independencia del nivel social, cultural o económico".
"Todas las sociedades patriarcales discriminaron históricamente a las mujeres, relegándolas a un papel secundario, generalmente vinculado a su rol de madres, educadoras y cuidadoras", reza el comunicado leído por López Abella.
De este modo, subraya que, como recoge la 'Declaración sobre la eliminación de la violencia contra la mujer' de la ONU, el uso de la violencia se convierte en "un mecanismo fundamental" para la "subordinación" de la mujer al hombre.
Así, fijan como "prioridad de Estado" combatir "todo acto de violencia" que provoque "sufrimiento físico, sexual, psicológico o prejuicio económico" contra la mujer.
PACTO DE ESTADO
La declaración institucional de la Xunta recuerda el Pacto de Estado en materia de Violencia de Género, aprobado el pasado verano en el Congreso de los Diputados, que llama a conseguir de forma "urgente" un consenso institucional para combatir esta lacra.
En este pacto se fijan las siguientes líneas de actuación: sensibilizar y prevenir, mejorar la respuesta institucional, perfeccionar la asistencia, proporcionar ayuda y protección a las víctimas y a los menores, impulsar la formación de los agentes implicados, prestar atención a los datos estadísticos o fijar compromisos económicos, entre otros.
"Las Administraciones públicas y la sociedad en su conjunto debemos persistir en la búsqueda de soluciones eficaces para la protección de las víctimas, la persecución de los autores, pero sobre todo en la prevención de este delito que año a año nos avergüenza como sociedad", concluye la declaración.