Condenado a cuatro años de prisión un septuagenario ourensano por abusos sexuales a una menor a la que cuidaba

OURENSE 15 Jun. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia Provincial de Ourense ha condenado a cuatro años y un día de prisión a un septuagenario por un delito continuado de abusos sexuales a una niña que quedaba al cuidado de su esposa, cuando ésta no se encontraba en casa.

La sentencia también le prohíbe acercarse a la menor, su domicilio o su centro de estudios durante un plazo de cinco años y le impone una multa de 2.000 euros.

La sala considera probado que el hombre hizo tocamientos a la víctima, que tenía seis años en el momento de los hechos, "en un número indeterminado de ocasiones" entre 2014 y enero de 2016.

Aprovechando las ausencias de su mujer cuando ésta iba a hacer las compras o debido a otras ocupaciones domésticas, el acusado realizaba "tocamientos" en las partes íntimas de la víctima, tanto por encima como por dentro de la ropa y, después de bajarse los pantalones, le pedía que le tocara el pene.

En la sentencia se destaca que la menor ha mantenido desde el primer momento "idéntica versión de lo ocurrido, sin contradicciones". Así, siempre ha relatado que el acusado la tocaba cuando se quedaban a solas en el salón de la casa, mientras que ella estaba viendo la televisión o haciendo los deberes.

CORROBORADO

Tanto durante la investigación judicial, como ante los psicólogos y en el juicio, la niña refirió como el hombre la tocaba y le preguntaba si le gustaba, mientras que ella le pedía que parase. La niña también refirió que había pedido a sus padres que no la dejaran en la casa de sus vecinos.

Según la sentencia este último punto fue "debidamente corroborado" por las declaraciones de la madre, que señaló durante el juicio que su hija le había dicho que no quería ir más a la casa de sus vecinos porque el hombre "le tocaba abajo".

Fiscalía y acusación particular habían reclamado seis años de prisión y una multa de 20.000 euros, mientras que la defensa había solicitado la libre absolución por considerar que no habían quedado probados los hechos.

La defensa había negado que el hombre llegase a quedarse a solas con la menor, y en esa línea declararon su esposa, su hija y su yerno. Si bien, la sentencia resalta que el propio acusado llegó a reconocer que en alguna ocasión se quedó con la menor viendo la televisión, aunque señalando que "cada uno en un sofá". La sentencia no es firme y frente a ella cabe un recurso de casación ante el Tribunal Supremo.