SANTIAGO DE COMPOSTELA, 12 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Juzgado de Instrucción Número 3 de Carballo (A Coruña) ha condenado a cuatro meses de prisión por un delito de resistencia al hombre detenido por apuñalar mortalmente a otro, hechos por los que se encuentra en prisión provisional.
Este martes ha tenido lugar, a través de videoconferencia, ya que el hombre se encuentra en prisión provisional por apuñalar mortalmente a otro varón, un juicio rápido por una pieza separada por resistencia a la autoridad en el momento de la detención por la Policía Local de Carballo.
Según han confirmado fuentes judiciales a Europa Press, el acusado no ha tenido que desplazarse a los juzgados de Carballo, sino que este juicio rápido se ha celebrado por videoconferencia desde la prisión de Teixeiro.
PRISIÓN PROVISIONAL
El lunes la titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Carballo, en funciones de guardia, decretó prisión provisional sin fianza para este hombre, detenido el pasado viernes, por apuñalar mortalmente a otro en una carretera secundaria del municipio.
Esta causa se sigue por un supuesto delito de asesinato, al entender que existen las agravantes de alevosía y ensañamiento (el informe preliminar de autopsia indica la existencia de unas 50 puñaladas), y otro delito de tenencia ilícita de armas.
El sospechoso portaba en el momento de la detención un arma que fuego, aunque todas las lesiones que presentaba el fallecido son por arma blanca.
El crimen tuvo lugar pasadas las 21,00 horas del viernes en la Avenida dos Abetos, la carretera que una la parroquia de Bértoa con la de Oza. Fuentes próximas a la investigación explicaron que la investigación se centra en un ajuste de cuentas como principal hipótesis.
Tras recibir el aviso de la presencia de un cuerpo por parte de un particular, las fuerzas y cuerpos de seguridad iniciaron en la noche del viernes una investigación que dio como resultado la detención del presunto autor por parte de la Policía Local tras un pequeño accidente de tráfico. Una vez trasladado a los calabozos, la Guardia Civil se hizo cargo de la investigación.