La mujer, detenida por supuesto homicidio, se encontraba ingresada en el Chuac cuando el 20 de enero la Guardia Civil encontró el cadáver
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -
El cuerpo del hombre encontrado muerto el pasado 20 de enero en una vivienda en Paderne (A Coruña), suceso por el que la semana pasada fue detenida su mujer, apareció en la cama y con varios golpes en la cabeza. Así lo confirman a Europa Press fuentes conocedoras del caso, que aseguran que no constaban denuncias por malos tratos ni violencia doméstica entre ambos.
La Guardia Civil apresó el 1 de marzo a la esposa del fallecido, un hombre de unos 60 años de edad. Ese mismo día, pasó a disposición del Juzgado de Instrucción número 1 de Betanzos --en funciones de guardia-- y la magistrada decretó su ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza. Desde entonces, permanece en la cárcel de Teixeiro.
La investigación, dirigida por la Policía Judicial de A Coruña, se inició a raíz de que apareciese este hombre muerto en la vivienda que ambos compartían en la parroquia de Velouzás. El varón convivía con su esposa, no se relacionaba con su entorno y "llevaba una vida sencilla y aislada del pueblo", tal y como destaca la Guardia Civil en un comunicado difundido a los medios.
Fueron los propios vecinos los que dieron la voz de alarma, extrañados por no ver durante bastantes días a ninguno de los dos moradores de la vivienda. Además, tenían conocimiento de que la mujer había ingresado recientemente en el Complexo Hospitalario Universitario da Coruña (Chuac).
De hecho, las fuentes consultadas explican que a principios de enero, días antes de que apareciese el cuerpo, la mujer solicitó una ambulancia para que la llevasen hasta este centro sanitario, en el que permaneció hospitalizada.
Ante las alertas de los vecinos, agentes de la Guardia Civil y una dotación de bomberos se trasladaron hasta el domicilio el 20 de enero. Tras comprobar el estado del mismo, localizaron el cuerpo sin vida del hombre en el interior.
La Policía Judicial se hizo cargo de la investigación para el esclarecimiento de los hechos y, tras numerosas indagaciones, junto a los informes periciales, la autopsia y demás pesquisas, pudieron vincular a la mujer con la muerte violenta del hombre.
Así, durante la mañana del pasado miércoles, 1 de marzo, la Guardia Civil procedió a detener a la esposa del fallecido por un supuesto delito de homicidio, enmarcado en la modalidad de violencia doméstica.
ACTUACIONES JUDICIALES
Ese mismo día, la apresada pasó a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Betanzos, en funciones de guardia, que decretó prisión provisional por considerar que "concurrían indicios suficientes" sobre su participación en los hechos, subraya finalmente el comunicado del Instituto Armado.
Según fuentes judiciales consultadas por Europa Press, la magistrada decretó el mismo 1 de marzo el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza de la mujer tras prestarle declaración.
Además, el juzgado practica las diligencias correspondientes y está pendiente de recibir informes de los forenses para avanzar en el caso.