La Guardia Civil interviene 30 armas de fuego y una importante cantidad de munición de diversos tipos y calibres
PONTEVEDRA, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil ha detenido a un vecino del municipio pontevedrés de Tomiño que había convertido un galpón próximo a su vivienda en un taller clandestino de reparación y venta de armas. Así, se le considera autor de un delito de tenencia, tráfico y depósito de armas y municiones.
En una rueda de prensa celebrada este viernes en la Comandancia de la Guardia Civil de Pontevedra, el delegado del Gobierno en Galicia, Santiago Villanueva, y el coronel de la Guardia Civil Miguel Estévez han explicado que el detenido es un "experto artesano" en la manipulación de armas.
Según han señalado, disponía de una "pequeña armería" y "era capaz de hacer cualquier tipo de modificación" que le demandaban sus clientes, que eran fundamentalmente personas de la provincia de Pontevedra y del norte de Portugal.
En el marco de esta operación, denominada 'Susurro', los agentes del Instituto Armado se han incautado un "arsenal" compuesto por treinta armas de fuego y un importante cantidad de munición de diversos tipos y calibres. Así, según han explicado, han evitado que estas armas "puedan trasladarse al mercado" y llegar "a manos de delincuentes", según ha concretado Santiago Villanueva.
La investigación comenzó a finales del pasado año por el Grupo de Información de la Comandancia de Pontevedra, a raíz de un anuncio sobre venta de armas que aparecía publicado en una conocida página web de Internet.
Una vez averiguada la identidad del anunciante y ubicado su domicilio en el municipio de Tomiño, fue necesaria una discreta labor de investigación y control sobre el inmueble hasta que se pudieron reforzar las sospechas de que esta persona se estaba dedicando ilegalmente al comercio y reparación de armas de fuego, según han señalado.
REGISTRO
Con el resultado de las pesquisas realizadas, el Juzgado de Instrucción Número 2 de Tui libró el correspondiente mandamiento de entrada y registro en el galpón, que se llevó a cabo durante la mañana del jueves 16 de marzo.
En el registro se hallaron cuatro rifles de caza mayor y veinte escopetas de caza, además de seis armas cortas --cuatro revólveres y dos pistolas--, así como distintas piezas sueltas, entre ellas un silenciador y tres cañones para las escopetas.
Los agentes requisaron también 15.500 cartuchos de caza de distintos calibres, 68 cartuchos de arma de guerra, 650 de varios calibres para arma corta y 1.550 para arma larga.
En el registro efectuado también en su domicilio se encontró otra pistola con su correspondiente munición y "algo de dinero" y se le intervino su ordenador para poder analizar su contenido. El detenido ya ha pasado a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Tui.
La investigación continúa abierta para conocer la entidad y el volumen de este negocio ilegal, averiguar la procedencia de las armas y dirimir las responsabilidades legales de los propietarios de las escopetas que estén documentadas, por haber entregado las armas a un establecimiento no autorizado.