Una especialista del Hospital Vithas Vigo destaca el aumento de caída de pelo debido al brote de covid de este verano

   VIGO, 12 Nov. (EUROPA PRESS) -

   El brote de covid que se produjo este verano está dejando estos días un aumento en las consultas por la pérdida de pelo, según ha destacado la dermatóloga Iria Montero Pérez, especialista en tricología, que acaba de abrir una nueva consulta dedicada a la salud capilar en el Hospital Vithas Vigo.

   La doctora Montero señala que este incremento de consultas se debe, también, al inicio del otoño, la época del año en la que se hace más notable la pérdida de cabello.

   Según informa Vithas en un comunicado, la especialista en tricología del hospital vigués explica que, "igual que las hojas de los árboles o el pelo de los animales, con la llegada del otoño se cae el pelo", y, en la mayor parte de los casos "se vuelve a regenerar sin necesidad de recurrir a vitaminas ni a lociones anticaída ni a ningún otro tratamiento". De hecho, se estima que cada aproximadamente cuatro años se muda completamente el cabello.

   A esto, se le une el hecho de que este año se están detectando más casos de caída de temporal de pelo como un efecto secundario en algunos pacientes que, en verano, padecieron la covid-19.

   Entre las secuelas dermatológicas conocidas de la enfermedad causada por el coronavirus SARs-CoV-2 está el efluvio, pero, los estudios internacionales realizados en este sentido apuntan a que causa una caída del pelo, pero no pérdida del folículo, es decir, que el pelo vuelve a crecer.

TIPOS DE ALOPECIA

   En función del daño en el folículo piloso las alopecias se pueden clasificar en cicatriciales, en las que el pelo ya no puede volver a regenerarse y no cicatriciales, en las que el folículo tiene posibilidades de recuperación.

   Entre las alopecias cicatriciales más frecuentes se encuentran la alopecia frontal fibrosante o el liquen plano pilar y entre las no cicatriciales destacan la alopecia androgénica (la más común por tratarse del envejecimiento normal del folículo), la alopecia areata (muy característica por su presentación en parches) y el efluvio telógeno crónico o agudo (que, por lo general, permite la recuperación espontánea tras cesar la causa), y que es la que se está dando asociado al brote de la covid-19 de este verano.

   El efluvio telógeno agudo se diagnostica en consulta después de un estudio de la calidad del cabello y un análisis completo. El tratamiento pasa por eliminar la causa de la caída del pelo y a partir de ahí suele regenerarse progresivamente el cabello. En algunos casos extremos, se puede completar el tratamiento con terapias orales para mejorar la densidad capilar.

   Estos tipos de alopecia constituyen las más frecuentes de las que se ven habitualmente en la consulta de tricología. La tricología es la subespecialidad médica de la dermatología que estudia, diagnostica y trata las enfermedades del cuero cabelludo y del propio pelo. La doctora Montero Pérez es una dermatóloga que se ha especializado en los tratamientos tricológicos, dirigiendo una unidad especializada desde hace cinco años. Posee un máster internacional en Tricología y Trasplante Capilar por la Universidad de Alcalá.