Subraya que el vicepresidente del Popular le ratificó que no hubo un problema de "capital" sino de "una salida masiva de depósitos"
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 8 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, pedirá a las autoridades del Santander, tras la compra del Banco Popular, que tengan "sensibilidad" con los trabajadores, "doblemente castigados" porque ven "en duda" su puesto de trabajo y, en algunos casos, eran accionistas del banco. También incidirá en la "importancia" que tuvo históricamente para la comunidad el Banco Pastor, que en su día se integró en el Popular.
Todo ello lo hará frente a una "mala noticia" y un proceso en el que la Xunta, ha admitido en la rueda de prensa posterior a la reunión semanal de su Ejecutivo, tiene "cero competencias". Y es que trata de un banco "cotizado" en el que son otras entidades como el Banco de España y la entidad supervisora europea "las que pueden concretar cuestiones al respecto".
A preguntas de los periodistas, Feijóo ha admitido que la compra del Popular es "una mala noticia" con la única "parte buena" de que ningún ahorrador ni depositario perderá "ni un euro".
"Todas las demás noticias no son buenas para los trabajadores ni para los accionistas en España y en Galicia, que perdieron su capital. Y no creo que haya otra forma de verlo porque lo demás sería ocultar la realidad", ha reflexionado, antes de reafirmarse en que la Xunta tiene "cero competencias" ante este problema.
Fundamentalmente, ha situado "dos problemas" en Galicia: el número de oficinas "solapadas" de Santander y Popular en el mismo municipio (unas 110), y también los alrededor de entre 25.000 y 30.000 accionistas afectados por el paso ratificado en la pasada jornada.
SENSIBILIDAD Y ALTURA DE MIRAS
Feijóo también ha recalcado que la plantilla que suman Popular y Santander en Galicia supera los 2.000 trabajadores y ha remarcado que su Ejecutivo pedirá a la entidad compradora "sensibilidad" en relación a este asunto, además de subrayar la "importancia que tuvo históricamente" en Galicia el Banco Pastor.
"Les vamos a pedir que hagan las cosas con altura de miras porque los trabajadores están doblemente castigados: tienen en duda su puesto de trabajo y muchos, además, eran accionistas del banco, así que tendrán un impacto doble en su futuro laboral y en sus cuentas de ahorro", ha argumentado.
"Espero que en el Santander, uno de los grandes bancos del mundo, esa sensibilidad tenga una especial incidencia", ha apostillado.
"SALIDA MASIVA" DE DEPÓSITOS
Por otra parte, Feijóo ha revelado que en la pasada jornada le llamó el vicepresidente del Banco Popular y le ratificó que "el problema básico no fue de capital, sino de liquidez, de una salida masiva de depósitos con riesgo de no poder hacer frente a las salidas masivas de depósitos que se podían producir en días sucesivos".
"Cuando se retiaron en un día más de 5.000 millones de euros era evidente que eso iba a producir un colapso en el banco y, automáticamente, la entidad supervisora europea, junto con las autoridades de España, decidieron actuar de forma inmediata", ha zanjado.