SANTIAGO DE COMPOSTELA, 24 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha hecho un balance positivo de los cien primeros días de su tercer mandato en Galicia, con el compromiso de "mejorar" el proyecto de país que inició en 2009 sin cambios "radicales", en los que "no" cree. Para ello, ha puesto "deberes" a sus conselleiros y altos cargos, a los que ha pedido "no confundir la confianza de los gallegos con un cheque en blanco hasta 2020".
"Nadie nos regaló nada y queda mucho por hacer. Os convoco para gestionar la confianza de los gallegos hasta el año 2020", ha proclamado el presidente de la Xunta, quien ha hecho un balance genérico ante los miembros de su Gobierno.
En el acto, con intervenciones también de todos los conselleiros para repasar las medidas de sus departamentos, Feijóo ha aprovechado para llamar a no confiarse porque el pueblo gallego es "inteligente" y su evaluación, ha advertido, no cesa.
Feijóo también ha pedido a los suyos "no perder el espíritu de trabajo y superación constante", el "combustible" fundamental para ser alto cargo, y que "jamás" duden en "reivindicar" el modelo de sociedad y de país en el que que "creen y trabajan: la Galicia próspera, justa, tranquila y para todos, sin exclusiones".
En el Día de Rosalía, ha citado unos versos de su poema 'Non che digo nada... Pero ¡vaia!', antes de remarcar que en cien días de este nuevo mandato los miembros de su equipo han demostrado que "vivir de rentas" no está en su "ADN" y ha apelado a "seguir demostrando cada día que los gallegos acertaron hace cinco meses".
El líder del PPdeG ha subrayado que el de este viernes es un balance que "se conjuga en futuuro, no en pasado" ya que no se miran "con complacencia" las 150 decisiones adoptadas en los primeros cien días, sino que todos los cargos de la Xunta se reúnen "con la ambición de los 1.300 días" que quedan. "La Galicia que abandonaremos en 2020 tiene que ser la Galicia preparada para 2020 y 2030, y para ello hay que llegar con los deberes hechos", ha sentenciado.
A los ciudadanos les ha enviado también un mensaje claro de que el suyo no es un Gobierno rupturista, por lo que su objetivo es "mejorar" el proyecto de país iniciado en 2009, pero en la misma línea de acción, sin "giros de 180 grados". Y es que, a su juicio, "cambiar lo que se puede mejorar es una demostración de inteligencia", mientras que "cambiarlo todo es una demostración de inconsistencia".