El dirigente popular vigués se compromete a "seguir trabajando" hasta las elecciones, pero evitar desvelar su futuro político
VIGO, 30 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente del PP de Vigo y portavoz del grupo municipal, José Manuel Figueroa, ha reconocido este viernes que se había postulado como candidato a la alcaldía pero que asumió dar un paso atrás, consciente de sus "limitaciones", porque "había compañeros que lo podían hacer mejor".
Así lo ha admitido a preguntas de los periodistas durante la rueda de prensa en la que él mismo anunció que la candidata sería la conselleira de Facenda, Elena Muñoz. "Yo quería ser candidato pero vi mis opciones. También soy consciente de mis limitaciones y hasta dónde puedo llegar. Había compañeros que lo podían hacer mejor", ha aseverado.
En esa línea, ha subrayado que es "un dirigente con años de experiencia". "Sé cómo es mi partido, y el papel que tengo que jugar. Nadie me puede tachar de que me haya marchado, o dejado mis responsabilidades al margen", ha reivindicado, y ha proclamado que volvería a repetir sus "planteamientos".
José Manuel Figueroa, quien ha insistido en varias ocasiones sobre su buena relación personal y política con Núñez Feijóo y con la propia Elena Muñoz, ha reconocido que fue "en una comida, en verano", cuando optó por dar ese paso atrás. A su juicio, para liderar el partido en Vigo tenía que mostrar su "ambición", pero ha afirmado que supo reconocer "cuándo se acabó esa ambición".
FUTURO
Sobre su futuro, el portavoz municipal y presidente local solo ha querido garantizar que terminará su labor actual, y no ha desvelado si intentará estar en la lista que encabece la candidata. "Mi compromiso es hasta finales de mayo o junio, seguiré trabajando en el grupo y como presidente del partido", ha añadido.
A ese respecto, también ha aclarado que Feijóo no le ha prometido "ninguna salida", y que no tiene "ningún compromiso" con él, al margen del político o de la relación de amistad.
Pese a no desvelar su futuro papel en el partido o como cargo público, Figueroa ha asumido que el nombramiento de Elena Muñoz supone un punto de inflexión. De hecho, ha hecho mención a un momento de "traspaso ejemplar" y con el partido "unido" pese a los malos momentos.
El presidente local se ha mostrado "muy orgulloso" del PP de Vigo, y también de su propia trayectoria política, al tiempo que ha indicado que el partido es su "casa", de la que no se irá. "No sería nada sin mi partido", ha sentenciado.