Las posturas de Xunta y sindicatos siguen alejadas, tras quedar sobre la mesa una nueva propuesta que no mejora la última oferta económica
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -
La huelga indefinida que paraliza los juzgados gallegos desde el pasado 7 de febrero prosigue, después de que Xunta y sindicatos no hayan sido capaces de acercar posturas tras más de nueve horas de reunión este lunes, aunque se han emplazado nuevamente para este martes a las 9,00 horas.
La justicia gallega vivirá así una nueva jornada de paro --la décima efectiva--, tras quedar en evidencia que, pese a la duración del encuentro, que empezó a mediodía en la Escola Galega de Administración Pública (EGAP), las partes continúan en extremos "muy alejados".
Cumpliendo el guión de los últimos encuentros, los directores xerais de Función Pública, José María Barreiro, y su homólogo de Xustiza, Juan José Martín, llegaron a la reunión con el comité de huelga con una nueva propuesta, aunque tal y como habían avanzado el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y el jefe del Ejecutivo, Alberto Núñez Feijóo, no variaron la última oferta económica.
De este modo, la subida retributiva del complemento autonómico que ofrecen a los funcionarios de justicia se mantiene en la horquilla de entre 816 y 1.080 euros más al año. Pero la Xunta sí puso sobre la mesa otras "mejoras" relativas a la consolidación o creación de nuevas plazas y también a las sustituciones.
En cuanto a la "discriminación" en los descuentos de las bajas por incapacidad temporal, una cuestión clave para los sindicatos, se supedita a la modificación de la normativa del Estado, que se está negociando a nivel estatal. Si se llega a acuerdo en esas negociaciones en Madrid, se aplicará en Galicia.
Los sindicatos, por su parte, no han planteado ninguna alternativa porque acusan al Gobierno de no tener voluntad de negociar. Así, al margen de demandar una serie de nuevos documentos a la Xunta, mantienen su reclamo de un incremento de 225 euros al mes, unos "2.700 euros más al año", que el Ejecutivo autonómico ve "inasumibles".
MÁS DE NUEVE HORAS REUNIDOS
Durante las más de nueve horas que ha durado la reunión, los principales movimientos en la negociación se produjeron en la mañana. Hubo dos recesos y los sindicatos tuvieron la oportunidad de analizar la propuesta de la Xunta, pero ya antes de entrar habían advertido que era preciso que hubiese avances en las cinco reivindicaciones para empezar a hablar de acuerdo.
Así, tras el segundo receso, fuentes presentes en la reunión consultadas por Europa Press han constatado que se inició "una larga tarde de desgaste" en la que ninguna de las dos partes, pese a la falta de avances, quería levantarse primero. Tanto Xunta como sindicatos quieren evidenciar su voluntad de diálogo.
Sin embargo, pese a permanecer reunidos, pronto empezaron los indicios de que el diálogo no avanzaba. Por ejemplo, los sindicatos cursaron comunicación a la Delegación del Gobierno en Galicia con la convocatoria de una manifestación central en Santiago para el próximo sábado 24.
Además, empezaron a difundir por redes sociales algunas manifestaciones "insultantes", bajo su punto de vista, que les habría dirigido Barreiro durante el encuentro. Por ejemplo, les molestó que, según su versión, les tildara de "privilegiados", que se "jactara" de que la Xunta "ahorra dinero" con la huelga o que les instase a concursar plaza fuera de Galicia si no están "contentos".
DIMISIÓN DE BARREIRO
El foco del enfado de los sindicatos se centra en que la Dirección Xeral de Función Pública tenga un papel clave en las negociaciones. De hecho, según afirmó uno de los miembros del comité de huelga, Óscar Freixedo (CIG), quien ejerció de portavoz tras el encuentro en una rueda de prensa conjunta de los siete sindicatos representados, habría sido Barreiro quien les instó a "marcharse" si no estaban "contentos".
A Barreiro le ha atribuido también la afirmación de que, con la huelga indefinida activada, los sindicatos ponen a Galicia a la altura "de Venezuela". "Nosotros no invitamos a nadie a marcharse, esta persona sí que tendría que ser destituida de inmediato", ha advertido el portavoz sindical, mientras alguno de sus compañeros volvía a calificar al director xeral de Función Pública de "sicario político".
"Nos dijeron que, si no estábamos contentos, emigrásemos; y que esto parecía Venezuela. La postura de la Xunta es patética, llevamos aquí desde por la mañana para que la Xunta nos ofrezca algo y su única oferta es nada", ha esgrimido el sindicalista.
"ENROCADOS" EN LA CUESTIÓN ECONÓMICA
La otra parte, a través de las declaraciones de Juan José Martín y José María Barreiro, ha defendido las mejoras de su propuesta y ha situado a los sindicatos "enrocados" en la cuestión retributiva. "Como nos temíamos", ha señalado Martín, en declaraciones a los medios. "Aumento retributivo y aumento retributivo", ha agregado, a su lado, el responsable de Función Pública.
Ambos dirigentes se han reafirmado en que la oferta económica de la Xunta no va a variar tampoco en la próxima jornada, porque es "muy buena". Con todo, aportarán algún nuevo dato --como la fecha de creación de las plazas de refuerzo-- y esperan que se pueda hablar de "otras cuestiones" para "mejorar el servicio público".
Con todo, después de una novena jornada de paralización en los juzgados de la comunidad, los representantes de la Xunta mantienen que para ellos la negociación no está cerrada y "confían" en poder solucionar el conflicto en la nueva cita.