OURENSE, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Diputación de Ourense, Manuel Baltar Blanco, ha asegurado que no se plantea "en absoluto" presentar su dimisión al frente de la institución provincial, después de que una mujer lo hubiese denunciado ante la Fiscalía por, según su versión, haberle ofrecido en 2010 una plaza fija de trabajo a cambio de sexo.
La denunciante también ha aportado a la denuncia, según ha desvelado 'eldiario.es', mensajes de móvil que se habría intercambiado con el político popular, junto a grabaciones. Preguntado por si se reconoce en los audios que han sido difundidos por el mencionado medio, Baltar Blanco ha evitado aclarar este extremo y se ha limitado a contestar que ejercerá "todas las acciones legales con toda la contundencia".
Además, en declaraciones a los medios y preguntado por si se siente respaldado por su partido una vez que ha trascendido la denuncia, el presidente provincial ha rechazado manifestarse al respecto. "No voy a hacer ningún tipo de declaración sobre lo que dice mi partido", ha sentenciado.
REACCIONES A LA DENUNCIA
En la jornada de este martes, cuando se conoció la denuncia de la mujer ante la Fiscalía, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, abogó por esperar "a ver exactamente qué ocurre con esa denuncia".
"Vamos a ver lo que la Justicia nos concreta. Estaremos atentos al desarrollo de una denuncia y de una contradenuncia, o de la decisión judicial que está instando el presidente de la Diputación", manifestó el mandatario autonómico este martes, aunque este miércoles guardó silencio en el pleno cuando fue interpelado por el portavoz del BNG, Francisco Jorquera, por esta cuestión.
También en el día que se conoció la denuncia, el portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Rafael Hernando, se pronunció al respecto para tildar de "repugnante" que un cargo público ofrezca trabajo a cambio de mantener relaciones sexuales y aconsejar a Baltar que contraste la denuncia y dé su versión.
En su defensa salió su padre y predecesor en el cargo, José Luis Baltar Pumar, quien consideró "un chantaje" la denuncia presentada y juzgó que no tenían "fundamento "ninguno".