Esta propuesta, introducida de urgencia por el PP, se debatió gracias al voto favorable del alcalde 'díscolo' de Becerreá
LUGO, 30 May. (EUROPA PRESS) -
El PSOE de Lugo ha secundado este martes por sorpresa una petición del PP para relevar al presidente de la Diputación, Darío Campos, del liderazgo de Suplusa basándose en la "parálisis" de esta sociedad pública de gestión urbanística.
La propuesta cogió con "el pie cambiado" a los socialistas lucenses, según las fuentes consultadas por Europa Press, toda vez que no estaba incluida en el orden del día de la junta general de Suplusa. De hecho, su debate se introdujo gracias a que Manuel Martínez, el alcalde socialista 'díscolo' de Becerreá, sumó su voto a los del PP.
A partir de ahí, los socialistas, incluido el propio Darío Campos, apoyaron la iniciativa del PP que pedía su relevo. También lo hizo Manuel Martínez, al igual que los populares, y sólo el BNG se opuso a sustituir al presidente provincial.
La presidencia de Suplusa era uno de los puestos reclamados por Manuel Martínez en la negociación para volver a la disciplina socialista, de modo que el cambio "ya estaba previsto", según el PSOE lucense. Con todo, sus votos respaldaron una iniciativa del PP crítica con la gestión llevada a cabo y que no plantea quién será su recambio.
OTRO VOTO DE MARTÍNEZ CON EL PP
En cuanto al voto del alcalde becerrense junto al PP para debatir esta cuestión, él mismo lo ha justificado --en declaraciones a Europa Press-- en que había "un compromiso" de que él accedería al cargo.
De hecho, ha interpretado que el resto de sus compañeros de filas "se despistaron" al no apoyar la urgencia de la medida, si bien ha aceptado que tal vez preferían haber impulsado ellos el cambio en Suplusa en lugar de hacerlo a instancias del PP.
HERIDA ABIERTA EN EL PSOE DE LUGO
Martínez fue designado el pasado mes de febrero vicepresidente de la Diputación de Lugo para cerrar la herida abierta en el PSOE lucense, después de que, con su voto, aupase a la popular Elena Candia a la presidencia provincial y posteriormente contribuyese a desalojarla a través de una moción de censura.
Esa última actuación también le valió, además del cargo, la reincorporación a las filas socialistas, de las que había sido expulsado por romper la disciplina de voto.
Su votación este martes de nuevo con el PP se produce apenas dos días después de ser excluido de la lista de delegados al congreso federal del PSOE; una candidatura en la que tampoco figura Darío Campos después de que el acuerdo de integración planteado inicialmente saltase por los aires debido a los vetos cruzados.