La organización de Villares renovará su dirección a través de unas primarias que quiere culminar a principios del mes de agosto
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 2 Jul. (EUROPA PRESS) -
En Marea ha convocado un plenario para el próximo sábado 13 de julio en el que las bases de la organización debatirán la implantación de cuotas mensuales para los inscritos y el nuevo rumbo del partido instrumental una vez superado el ciclo electoral de los últimos meses.
La cita, cuya ubicación todavía no está definida, ha sido presentada este martes por las viceportavoces de la coordinadora de En Marea, Ana Seijas y Mariló Candedo, que han apuntado que el partido instrumental pretende "desarrollar" los acuerdos de la asamblea fundacional de Vigo, de la que se cumplen tres años a finales del presente mes de julio.
Tres años después y con el espacio político dividido ya también en el Parlamento de Galicia, En Marea busca abrir un nuevo período con la vista puesta en las elecciones autonómicas previstas para el otoño de 2020.
Para ello, la organización celebrará primarias para renovar su dirección, en la que actualmente hay 14 asientos vacantes que corresponden a los miembros de la candidatura crítica con Luís Villares. Éstos se negaron a asumir sus cargos tras las polémicas primarias de diciembre de 2018 en las que el magistrado lucense renovó su liderazgo al frente de En Marea.
Un proceso interno que En Marea prevé culminar en la primera semana de agosto con la constitución del Consello das Mareas, que será el encargado de nombrar a los miembros de la coordinadora, la ejecutiva del partido instrumental que la actual dirección quiere ampliar hasta los 15 integrantes.
CUOTAS PARA LAS BASES
El calendario de las primarias será sometido a debate y opinión de las bases, que también tendrán que decidir sobre la creación de cuotas para la militancia que oscilarán entre los cinco euros mensuales y los dos euros para las personas que acrediten estar "en una situación precaria".
La decisión de implantar cuotas para los inscritos ya fue avanzada por la cúpula de En Marea tras una reunión celebrada el pasado 1 de junio. En ella, el Consello das Mareas informó de que la deuda contraída en los procesos electorales de abril (generales) y mayo (municipales y europeas) obligaba a la organización a "acordar un plan de ajuste interno", por lo que apelaban a sus bases a realizar "un esfuerzo económico".
"Las cuotas no se pondrían para resolver las cuestiones financieras de la organización", ha asegurado este martes Ana Seijas, que ha añadido que "las cuentas" del partido "están bien" y "se están cumpliendo con los plazos para tener todo el día".
El partido instrumental cifra en 4.000 las personas que permanecen inscritas en En Marea en la actualidad. De instaurarse el sistema de cuotas, existirían dos clases de inscritos en la organización: aquellos con las cuotas al día (tendrían voz y voto en las decisiones del partido) y los meros simpatizantes, que no tendrían derecho a votar en los procesos internos.
NUEVO MODELO ORGANIZATIVO
Además del calendario de primarias y el sistema de cuotas, En Marea también someterá a sus bases un "nuevo modelo organizativo" con el que pretenden "ahondar en una mejor comunicación y territorialización" para que el partido instrumental sea "más dinámico".
Hasta el próximo sábado está abierto el período de presentación de enmiendas a los documentos elaborados por la dirección, que fueron remitidos a los inscritos en la noche del pasado lunes. Estas propuestas oficialistas se elaboraron con base en las 15 asambleas convocadas en el último mes en otras tantas zonas comarcales de Galicia.
"Estamos situados donde siempre quisimos estar. Un espacio soberano y gallego", ha aseverado Mariló Candedo, que reivindica que en En Marea "tienen cabida los que quieran construir, sean o no nacionalistas, un espacio transversal".
Así las cosas, la cúpula de En Marea considera que, con la ruptura definitiva en el Grupo Parlamentario tras el pase de Villares y otros tres diputados al Mixto, "se abre una oportunidad" para "poder visibilizar un discurso coherente" que, según Candedo, no era posible hacer con las "peleas" internas.