Actualizado: domingo, 15 octubre 2017 11:56

   Tres regidores abandonaron el cargo inhabilitados por la Justicia y siete renunciaron para asumir otras responsabilidades

   SANTIAGO DE COMPOSTELA, 15 Oct. (EUROPA PRESS) -

   Un total de 45.689 gallegos de un total de ocho ayuntamientos han visto cambiar su alcalde desde las elecciones municipales de 2015 en otras tantas mociones de censura, de las cuales cinco han tenido como beneficiario al PP.

   Se trata de operaciones localizadas en la mayor parte de los casos en A Coruña, con seis: Boimorto, Noia, Santa Comba, Mugardos, Sobrado y Coristanco; mientras los otros dos se residencian en Pontevedra: Pontecesures y Oia.

   También se han registrado variaciones en el partido al mando en otros dos ayuntamientos, en los que, como consecuencia de pactos de gobierno, se produjo una alternancia. Ocurrió en el ourensano de A Rúa y en el pontevedrés de Sanxenxo.

   Además, otros 13 municipios han sido escenario de cambios de regidor debido a causas judiciales (se han producido tres inhabilitaciones y una dimisión), a la asunción de otras responsabilidades políticas (siete casos), a un fallecimiento y a una jubilación.

   Caso distinto es el de Cerdedo-Cotobade, dos municipios pontevedreses que decidieron iniciar los trámites para fusionarse y que, como consecuencia de ello, actualmente están regidos por una junta gestora que capitanea quien era el primer edil de Cotobade, Jorge Cubela.

A CORUÑA, LA MÁS CONVULSA

   La provincia de A Coruña ha sido, durante los, aproximadamente, dos años y medio que han transcurrido desde los comicios locales, la más convulsa en cuanto a relevos de alcaldes.

   Fueron seis las mociones de censura que vivió en esta etapa, y a esa cifra hay que sumar la que se debatirá en Fene (13.250 residentes) el próximo día 26, a instancias del PP y Somos Fene, para apartar al nacionalista Juventino Trigo de la alcaldía.

   También Boimorto (2.111 habitantes) pasó de manos del BNG al PP (y nueve meses después, el elegido alcalde dimitió y pasó el cargo a su número dos), mientras en Noia (14.337 vecinos) y Santa Comba (9.556 registrados) fue el PSOE el que perdió el bastón de mando.

   En paralelo, en Mugardos (5.335 vecinos), prosperó una censura contra los populares y actualmente gobierna Esquerda Unida; y en Sobrado (1.882 censados), los conservadores se aliaron con un partido independiente, ahora al frente del ayuntamiento, para desalojar a los socialistas.

   Mención aparte merece el caso de Coristanco (6.426 residentes), donde actualmente ocupa la alcaldía un concejal expulsado del PSOE con los votos del PP. El damnificado fue Amancio Lavandeira, de Terra Galega.

A POR LA TERCERA EN PONTEVEDRA

   Por su parte, los pontevedreses han sido testigos de dos mociones de censura en la primera mitad del mandato municipal, en Oia (3.002 censados) y Pontecesures (3.040 habitantes), donde el PP asumió los cargos arrebatados, respectivamente, a PSOE y BNG.

   Asimismo, el próximo martes se debatirá otra iniciativa de estas características en Tui (16.966 vecinos), pues el bloque de centro-derecha se ha aliado para poner al liberal Carlos Vázquez Padín, de Converxencia XXI, en el sitio que ocupaba Enrique Cabaleiro (PSOE).

DOS PACTOS DE GOBIERNO

   También han supuesto un cambio en el partido que lideraba el ayuntamiento los pactos alcanzados en A Rúa y Sanxenxo.

   En cuanto al primer municipio, actualmente gobierna el socialista Luis Fernández Gudiña, al renunciar en el ecuador del mandato la nacionalista María González, pues PSdeG y BNG empataron a tres concejales en los comicios y juntos pudieron superar los cinco del PP.

   En paralelo, en Sanxenxo, el popular Telmo Martín volvió a la alcaldía en virtud de un pacto alcanzado con Sanxenxo Agrupación Liberal (SAL), que rompió el gobierno que había formado con PSOE y BNG. El hasta entonces regidor, Gonzalo Pita, es ahora teniente de alcalde.

INHABILITACIONES EN LUGO Y OURENSE

   Otros de los motivos que provocaron cambios de alcalde en Galicia en esta etapa han sido las inhabilitaciones judiciales, y han sido tres las registradas: en Rairiz de Veiga y Vilariño de Conso (Ourense) y en Monterroso (Lugo).

   En el primero de los casos, el popular Xosé Xaquín Rodríguez Ambrosio fue inhabilitado por ocho años y medio a causa de un delito continuado de prevaricación administrativa, de modo que lo sustituyó su número dos, Josefa Asunción Morgade.

   Siete años de inhabilitación fueron los impuestos a Ventura Sierra, también por un delito de prevaricación, así que la también popular Melisa Macía asumió en agosto de este año las riendas de Vilariño.

   En Monterroso, Jesús Otero, el exsocialista que concurrió a los comicios al frente de una candidatura independiente, asumió una pena de un año de inhabilitación por la denominada trama de las multas de tráfico, y ahora Miguel Rico se sienta en el despacho de la alcaldía.

   También por causas judiciales dimitió en abril el socialista Jorge Tuñas en Negreira (A Coruña), pues fue acusado de apropiarse de 18 teléfonos móviles del ayuntamiento. Fue sustituido por Manuel Ángel Leis y apenas tres meses después fue absuelto por la Justicia.

CARRERA POLÍTICA

   El cambio de responsabilidades políticas es otra de las causas que motivaron el cambio de alcalde en siete ayuntamientos, si bien el partido al frente de la institución se mantuvo.

   Es lo que le ocurrió a los populares Ángeles Vázquez y Jesús Vázquez Almuiña: siendo alcaldes de Melide (A Coruña) y Baiona (Pontevedra), fueron requeridos por Alberto Núñez Feijóo para ocupar las consellerías de Medio Rural y Sanidade, respectivamente.

   También Ovidio Rodeiro abandonó el puesto en Boqueixón (A Coruña) para convertirse en delegado provincial de la Xunta.

   Por su parte, el popular Carlos López Crespo dejó la alcaldía de Outes (A Coruña) para ocupar un escaño en el Parlamento; un movimiento similar al de Davide Rodríguez, ex primer edil de Manzaneda (Ourense) y actualmente integrante de En Marea en la Cámara gallega.

   Por el Senado, a su vez, optaron los populares Gerardo Criado y Carmen Leyte, que dejaron las regencias de Vilalba (Lugo) y Cartelle (Ourense), respectivamente.

JUBILACIÓN Y FALLECIMIENTO

   Finalmente, en Narón (A Coruña), José Manuel Blanco cedió el puesto a Marián Ferreiro, también de Terra Galega, al alcanzar la jubilación; mientras que el fallecimiento del primer edil de A Gudiña (Ourense) motivó que su hijo, el popular José María Lago, tomase el relevo.

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