Una pregunta del PP sobre las residencias provinciales inicia una bronca que provoca que los dos miembros del BNG abandonen la sala
LUGO, 30 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Diputación de Lugo ha celebrado este martes un bronco último pleno previo a su renovación con las elecciones municipales del 26 de mayo. Durante la sesión, el alcalde de Pol, Lino Rodríguez (PSOE), y el regidor de Becerreá, el exsocialista Manuel Martínez, han protagonizado un cruce de palabras en el que también ha intentado mediar el presidente provincial, Darío Campos Conde.
Todo comenzó cuando el diputado del PP Juan Carlos Armesto formuló una pregunta sobre si la Diputación o los ayuntamientos de Trabada y Pol tienen los permisos correspondientes para abrir las residencias provinciales, porque consideran que ello le corresponde a Suplusa, empresa pública urbanística en manos de Manuel Martínez y en cuyo pleno los populares tienen mayoría.
Tras esto, el portavoz del gobierno, Álvaro Santos, le invitó a consultar los expedientes en la página web de la institución. "A pesar de ustedes, el Partido Popular, y sus trabas y recursos judiciales, las residencias están abiertas legítima y legalmente", afirmó.
Después de que la respuesta no convenciese al diputado popular, el alcalde de Pol, Lino Rodríguez, dijo que el centro de mayores de su municipio "se va a abrir con permiso y sin permiso". "Así que la voy a abrir. Póngase del lado del señor Martínez, que la voy a abrir", ha insistido.
"Y MIRAS PARA ELLA Y TOMAS POR EL CULO"
Durante esta intervención, el exsocialista y regidor de Becerreá ha comenzado a aplaudir de forma irónica, a lo que Lino Rodríguez le dedicó varias peinetas y le replicó: "La voy a abrir, y miras para ella y tomas por el culo".
En ese momento, Manuel Martínez ha pedido la palabra "por alusiones", ya que, según denunció, el otro diputado le había llamada "hijo de mala madre". Además, sugirió que Darío Campos "no tiene pelotas" para echar al regidor de Pol aunque a él, ha añadido, lo había expulsado alguna vez "por menos".
Por su parte, el presidente de la Diputación, que aseguró "no oír nada" respecto de su madre, amenazó con echar a ambos diputados pero también valoró que Martínez había sido "el primero" en faltar al respeto con sus aplausos.
El alcalde de Becerreá acusó a Campos Conde de defender a Lino Rodríguez "porque es compañero y amigo suyo". "Esta legislatura no sé qué reglamento se está aplicando, si el nuevo, si el viejo, si el suyo... Depende de usted de cómo se levante. Gracias y enhorabuena por la transparencia, la claridad y por el apoyo que me dio como diputado ante los insultos de don Lino", ironizó, refiriéndose al presidente de la Diputación.
EL BNG ABANDONA LA SALA
En medio de esta trifulca, los dos diputados del BNG Xosé Ferreiro y Antonio Veiga abandonaron la sala evidenciando que es "una pena que acabe así" el último pleno de la legislatura.
A través de un comunicado, los nacionalistas critican que el presidente provincial "no fue capaz de impedir" la discusión, lo que "demuestra que tampoco es capaz de mantener la organización de un gobierno que maneja más de 100 millones de euros anuales".
Y es que los enfrentamientos entre el ejecutivo provincial y Manuel Martínez se suceden desde el inicio de la legislatura en 2015, cuando este permitió la investidura de la alcaldesa de Mondoñedo, la popular Elena Candia, después de que el PSdeG decidiese no apostar por él para presidir la institución.
Asimismo, y después de que una moción de censura llevase a Darío Campos a dirigir la Diputación, Manuel Martínez rompió la disciplina de voto de los socialistas en diversas ocasiones favoreciendo, por ejemplo, que las competencias sobre las residencias las tuviese Suplusa --donde tiene mayoría el PP--. Ello le llevó a ser expulsado del PSOE y a su relevo como vicepresidente provincial el pasado año.