Una de las víctimas fue forzada a trabajar un día después de tener un aborto
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
Tres ciudadanos de nacionalidad rumana han aceptado penas de entre dos y cinco años de cárcel por obligar de forma violenta y con intimidación a prostituirse a mujeres en un club de alterne en Santiago de Compostela y en la provincia de Málaga.
En concreto, Bogdan Cristian Amarioarei ha aceptado cinco años de cárcel --para el que se pedían hasta 20 años por siete delitos--: dos años por dos delitos de prostitución de dos mujeres y un año por tráfico de drogas. Por su parte, Nicoleta Alexandru --pareja de Bogdan-- y Cristinel Dumitrascu han aceptado dos años de cárcel cada uno por un delito de prostitución. Además, se imponen multas de tres euros al día durante un año para todos ellos.
Este lunes se ha celebrado el primer día del juicio en la Audiencia Provincia de A Coruña --con sede en Santiago--, que estaba previsto para toda la semana, pero en el que se ha alcanzado un acuerdo de conformidad. La vista ha tenido un retraso de varias horas dado que ha sido necesario emplear la videoconferencia para una acusada que se encontraba en Fuengirola, al no poder viajar a Santiago por motivos de salud.
Según ha explicado a los medios el abogado de dos de los acusados --Bogdan y Nicoleta--, Manuel Ferreiro, inicialmente había otros dos acusados más --hasta un total de cinco--, pero finalmente se ha retirado la acusación contra uno de ellos y otro se encuentra en paradero desconocido, declarado en rebeldía.
HECHOS
En el acuerdo de conformidad, se recoge que a principios del año 2015 la brigada local de Extranjería y Fronteras de la Policía Nacional en Santiago de Compostela tuvo conocimiento de que Bogdan Cristian Amarioarei tenía bajo su "control" a varias mujeres a las que obligaba a ejercer la prostitución.
Este hombre llevaba un alto nivel de vida y, de hecho, pagaba 1.200 euros mensuales de alquiler de una vivienda unifamiliar en Bugallido, en el municipio coruñés de Ames, al tiempo que conducía vehículos de alta gama.
En los hechos reconocidos se explicita la violencia empleada por este grupo contra las mujeres, a las que agredieron hasta el punto de que necesitaron asistencia hospitalaria y que, posteriormente, eran obligadas igual a ejercer la prostitución. Una de las víctimas, apunta, tuvo incluso que "trabajar un día después de sufrir un aborto".
Asimismo, se indica que Bogdan Amarioarei y su pareja, Nicoleta Alexandru, se trasladaron a la provincia de Málaga "llevándose consigo" a una de las mujeres explotadas, a la que obligaron a trabajar en varios clubes de alterne de la ciudad de Torremolinos.
Por su parte, se reconoce que Cristinel Dumitrascu ejercía "un control continuo" sobre su pareja, a la que forzaba a entregarle sus ganancias.
Tras la denuncia interpuesta por una de las víctimas, la Policía llevó a cabo una operación que culminó con la detención de cinco personas de nacionalidad rumana: una en Guadalajara, una en Torremolinos, Málaga, y tres en Santiago de Compostela.
El acuerdo de conformidad reconoce también que Bogdan Amarioarei facilitaba cocaína a las prostitutas para que la distribuyesen entre los clientes.
Así, los abogados de los dos condenados a dos años buscarán la suspensión de la condena de cárcel, con base en el Código Penal al no tener antecedentes. En el caso de Bogdan Amarioarei, se encuentra en la prisión de Alhaurín de la Torre por otra causa de robos por fuerza en Málaga.