SANTIAGO DE COMPOSTELA 10 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Policía ha cargado contra los manifestantes que protestaban por el desalojo de un local okupa en Santiago después de que parte de los convocados se encerrase en las instalaciones de un céntrico colegio abandonado.
Las primeras cargas han tenido lugar, precisamente, junto al portón de acceso a este edificio, a fin de dispersar la entrada.
Como consecuencia de los disparos de pelotas de goma, muchos de los congregados se dispersaron desde la calle República Argentina hasta Alfredo Brañas; si bien otros decidieron sentarse en la carretera a modo de protesta.
Hacia ellos se dirigieron los antidisturbios para obligarlos a levantarse, incluso con porrazos, y a desviarse hacia Alfredo Brañas.
En paralelo, la Policía ha enviado a las cámaras y los periodistas hasta la cercana plaza del Doctor Puente Castro, por detrás de aproximadamente media docena de furgones y una veintena de agentes de antidisturbios en formación.
Todo esto ocurre mientras los que siguen encerrados en las antiguas instalaciones del colegio M.Peleteiro realizan una asamblea.