Cree que el traslado de sedes de empresas "es una medida más testimonial que efectiva", puesto que los negocios "siguen" en Cataluña
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 11 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la confederación de empresarios de Galicia (CEG), Antón Arias, aboga por el diálogo y la negociación entre el Gobierno central y el de la Generalitat, y vería "bien" que se celebrase una consulta pactada en Cataluña.
Así lo ha dicho en una entrevista en la Radio Galega, que recoge Europa Press y en la que añade que el traslado de sedes de empresas "es una medida más testimonial que efectiva", puesto que "salen" las sedes sociales pero las compañías y sus negocios "siguen allí".
Mostrando su "preocupación" por una situación a la que ve "difícil solución", Arias ha opinado que "el problema" reside en que "una parte de la población de Cataluña tiene un sentimiento determinado" y "esto no se va a solventar con medidas de carácter legal".
Para el representante de la patronal gallega, "quedan meses por delante muy complicados y las tensiones probablemente van a subir". Ante esto, "vería bien que hubiera una consulta a los catalanes, pero una consulta que estuviera lógicamente pactada y con un marco muy conocido y donde hubiera una serie de garantías".
CON UNA MAYORÍA REFORZADA
"Porque creo que lo que se pretende decidir tiene una trascendencia importante. Probablemente no se pueda decidir por una mayoría, habría que buscar algún tipo de mayoría reforzada para el caso de que hubiera un resultado favorable al sí", ha reflexionado.
Así, ha valorado que "se debería hacer" la consulta para evitar dar "el argumento de que no se les permite manifestarse" a aquellos que así lo desean. "Lo único que estamos haciendo es incrementar el número de independentistas", ha apostillado.
En esta línea, considera que "articular una consulta con garantías podría ayudar, primero, a tener una medida clara de la magnitud del problema y, sobre todo, a acallar esas voces que dicen que se les está limitando un derecho".
Respecto a la fuga de empresas, entiende que el "gran problema" es la "imagen que se traslada", puesto que "hay una cierta inseguridad jurídica de cara a decisiones de inversión". Tiene repercusiones "sobre Cataluña y sobre España, ha advertido: "Es una situación que para el mundo de los negocios no es buena", según Antón Arias.
"A GUSTO DENTRO DE ESPAÑA"
Así, enfatizando que la negociación "debería haberse producido mucho antes", Arias ha insistido en que él "haría el intento" de dialogar, antes de adoptar otro tipo de medidas. "Intentaría bajar un poco el suflé quitando argumentos y mostrando que hay una intención de que Cataluña quede en España y quede a gusto dentro de España", ha incidido.
Esta negociación entre ambos ejecutivos la propone "teniendo muy claro cuál es la situación" y "tasando muy bien los tiempos" por parte del Gobierno español.